Estrasburgo - Más de la mitad del hemiciclo europeo reclamó ayer al presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani, que retire unas declaraciones en las que presuntamente banalizaba la dictadura de Benito Mussolini al señalar que el fascista italiano hizo también “cosas positivas”. El propio Tajani criticó el miércoles que los medios italianos hubieran “manipulado” y sacado de contexto sus palabras a la emisora Radio24. “No fue un campeón de la democracia, pero algunas cosas hizo. Hay que decir siempre la verdad, si no, somos deshonestos”, indicó el político italiano, después de pedir que cuando se hagan juicios a la historia se hagan de modo “objetivo”. No obstante, ayer se retractó: “Como convencido antifascista, pido perdón a aquellos que hayan podido sentirse ofendidos por lo que dije, que de ninguna manera pretende justificar o desdramatizar un régimen antidemocrático y totalitario”.

“Me siento profundamente entristecido por el hecho de que, pese a mi historia personal y política, algunos puedan haber pensado que optaría por ser indulgente hacia el fascismo”, añadió el político de Forza Italia, que en las últimas semanas ha sido criticado en más ocasiones por utilizar su cargo para hacer campaña en Italia.

En las redes sociales, varios grupos políticos criticaron el día de las declaraciones que el presidente del Parlamento Europeo (PE) se hubiera expresado así, aunque fue ayer cuando, antes del turno de votaciones, los líderes liberales, socialdemócratas, ecologistas e Izquierda Unitaria trajeron a coalición el asunto.

Ecologistas e Izquierda Unitaria pidieron rectificación o dimisión, mientras que liberales y socialdemócratas reclamaron que aclare en detalle lo que dijo antes de pensar en próximos pasos a dar.

En esto, el líder de los liberales europeos, Guy Verhofstadt, pidió que Tajani se retracte, y le achacó que “haya empezado la campaña” y que no recuerde cuál es su cargo. De parte del Partido Popular Europeo intervino su vicepresidente, el español Esteban González Pons, quien aseguró que no hay duda de que su grupo europarlamentario “condena el fascismo, el nazismo, el franquismo y el comunismo”.

Esta intervención fue criticada por la líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en la Eurocámara, Iratxe García, quien censuró a Pons que “salga a defender a Tajani en el pleno. Y también es lamentable que ya no nos sorprendan las palabras de Pons ni de ningún otro dirigente del PP, que no solo coquetean, sino que blanquean a las fuerzas de extrema derecha que están amenazando el proyecto europeo, la convivencia misma y la democracia”, aseveró.

El líder de M5S en el hemiciclo europeo, Ignazio Corrao, afeó las palabras sobre Mussolini y dijo que Tajani muestra “su gran ignorancia” por el pasado del país y que debería dimitir. Por su parte, desde el grupo de los Conservadores y Reformistas europeos -el tercero en número de escaños- se limitaron a criticar las palabras de Tajani, ya que las consideraron “impropias” de un presidente de la Eurocámara.

Dado que los grandes grupos dentro del bando crítico a Tajani solo piden la rectificación y no la dimisión del presidente del Parlamento Europeo, parece poco probable que prosperase la aplicación del artículo 21, sobre el cese anticipado de los altos cargos de la cámara.

Ese precepto prevé que la Conferencia de Presidentes puede proponer un cese de cargo por mayoría de tres quintas partes y que después el pleno debe aprobarlo con el visto bueno de al menos dos tercios de los votos emitidos que representen una mayoría de los diputados que lo componen.