madrid - Los activistas antidesahucios protagonizaron ayer un nuevo escrache, esta vez contra la alcaldesa de Madrid y candidata, Manuela Carmena, que, tras acercarse a ofrecerles una reunión, les pidió “un poquito de silencio” porque, “como demócratas”, no se debe impedir “nunca” el poder escucharse. Esta nueva protesta ocurrió tras la protagonizada el miércoles contra dirigentes del PP y de Cs, y tuvo lugar en un desayuno al aire libre ofrecido por la candidata de Más Madrid a los vecinos de Moratalaz. “Botella desahuciaba, Carmena también”, le gritaron. Carmena no quiso replicar a la dirigente popular Cayetana Álvarez de Toledo, que calificó su gestión de “política senil”. - D.N.