pamplona - El Gobierno de Navarra ya asume que la deducción retroactiva es la única salida “posible, legal y garantista” al conflicto abierto después de que la justicia desestimara hace dos semanas los recursos del grupo de madres que reclama la exención del IRPF de maternidad con carácter retroactivo desde 2015. Así lo aclaró ayer la propia presidenta del Ejecutivo foral, María Chivite, que por primera vez desde la reunión que mantuvo el viernes con el colectivo hizo declaraciones públicas, para asumir que la sentencia impide hoy una devolución en los términos planteados por las madres, y que una deducción progresiva es lo único posible para mejorar la situación del colectivo, al que UPN, PSN y PP sacaron del grupo de rentas exentas en una reforma legislativa que se hizo en plena crisis y por la puerta de atrás.

En resumen: o esto, o nada. Es la frase que podría sintetizar la búsqueda de una salida que agrade a todos: al colectivo, al que se prometió la devolución; pero también a los socios de Gobierno -que defendieron que la devolución era ilegal- y también a la propia Hacienda Foral, que ha tenido sus dudas sobre el sustento jurídico de las pretensiones de las madres, al menos en un informe técnico fechado a finales de 2018.

Chivite lo resumió ayer: “La sentencia dice que no les corresponde una exención y el Gobierno, tal y como se comprometió, ha puesto una solución encima de la mesa; una solución que incluso para la mayoría de las madres es más favorable que una exención”. Es todavía una incógnita, pero se refirió así a lo que ya deslizó el lunes el portavoz socialista en el Parlamento, Ramón Alzórriz, que dejó entrever que el 40% de las madres con rentas más bajas verán tan mejorada su situación con el sistema de deducciones que en algún caso será equivalente a una exención.

Al respecto de si es posible ahora modificar la ley para permitir una exención, Chivite incidió en que “la sentencia lo que dice es que no procede la exención”. “Lo que hacemos nosotros es poner una solución encima de la mesa, que además para la mayoría de las madres es económicamente más favorable que la exención”, reafirmó.

nuevos factores A su juicio, “seguir abocando a las madres a que el tema de la exención es una cuestión posible es abocarlas a un periplo judicial que no va a tener éxito”. “Vamos a dar una solución normativa atendiendo a la sentencia y a la garantía jurídica”, concluyó. Precisamente, Chivite hizo referencia a los dos factores que explican el viraje del PSN: “Hay dos cuestiones que están sobre la mesa y no estaban en la legislatura pasada, una es la ley actual que entró en vigor el 1 de enero de 2019, que aboga por la deducción progresiva, y otra es la sentencia que tenemos que cumplir”. Así, resumió que “hay una ley en vigor durante todo este año y no puede haber un choque de intereses entre la ley que está actualmente en vigor; y no se puede hacer una exención porque legalmente no es posible”.

40%

de las madres, mejor. El sistema de deducciones progesivas con carácter retroactivo -aunque el concepto de retroactividad es espinoso, porque las madres no tendrán que hacer una declaración sustitutiva- dejará al 40% de las madres prácticamente igual que con un sistema de exención.

“satisfecha” con la exhumación

“Anomalía democrática”. La presienta del Gobierno de Navarra, María Chivite, también se refirió en su encuentro con José Luis Arasti a la inminente exhumación de Franco, prevista para mañana a las 10.30h. “Es una satisfacción”, apuntó, en la medida en la que significa la salida de un dictador de “un lugar de preferencia pública”, lo que a su juicio generaba una situación de “anomalía democrática”. También a la exhumación se refirió el delegado del Gobierno de España en Navarra, que celebró que “ya era hora” de acabar con una “anomalía democrática que una sociedad moderna no se podía permitir tener”. Durante el encuentro, ambos se refirieron también a los disturbios que se están produciendo en Catalunya, y enviaron un mensaje claro en contra de “todo tipo de violencia”, al tiempo que reiteraron una “apuesta por la convivencia”. Arasti se sumó a la condena y el apoyo “explícito” a los cuerpos policiales.