Madrid - La portavoz de Vox en la Asamblea, Rocío Monasterio, reconoció ayer que no fue colegiada como arquitecta hasta el año 2009, aunque justificó que los documentos que pudo haber firmado en años anteriores antes de obtener la titulación, no necesariamente requieren de la rúbrica de un arquitecto titulado.

En rueda de prensa tras la reunión de la Junta de Portavoces, Monasterio acusó de “manipulación” a responsables de medios de comunicación que, según aseguró, han presionado a extrabajadores suyos para que testifiquen contra ella, en relación a las presuntas irregularidades en proyectos que pudo haber firmado en 2003 y 2004 cuando aún no tenía la titulación de arquitecta.

Fake News Monasterio calificó de fake news las informaciones publicadas en El País, que reproduce el plano de un proyecto firmado por ella en 2003, y en eldiario.es, que asegura que la rúbrica de la portavoz de Vox figura en un certificado de obra con fecha de marzo de 2004.

Anteriormente a 2009, la portavoz habría firmado proyectos como arquitecta, entre ellos, el de los tres lofts construidos en suelo industrial en cuya reforma y venta mediaron -según sus propietarios- Monasterio y su marido, el también dirigente de Vox Iván Espinosa de los Monteros, y sobre los cuales el Ayuntamiento de Madrid ha abierto un expediente informativo.

La líder portavoz de Vox en Madrid indicó que responsables de varios medios de comunicación “de la izquierda” han llamado a extrabajadores suyos “ofreciendo” 4.000 euros para que testifiquen contra ella. “Es una forma poco edificante de hacer periodismo”, subrayó Monasterio, que dijo que ha “animado” a los afectados por esas presiones a que “denuncien”.

Para Monasterio es “un honor” que medios como El País estén “especialmente obsesionado” con ella, algo que refleja, a su juicio, que desde Vox se están “haciendo las cosas bien”.

La portavoz de Vox señaló que los documentos que pudo haber firmado antes de ser colegiada en 2009 no necesariamente requerían la firma de un arquitecto, ya que dependiendo de la tipología se requiere o no. - Efe

Otro caso salpica a Espinosa. Además de los escándalos de 2003 y 2004, un tercer caso inmobiliario sentó al marido de Monasterio, Iván Espinosa de los Monteros, en el banquillo aunque fue absuelto. La venta en diciembre de 2007 de una oficina con una entreplanta interior para la que no había licencia y que aumentaba los metros útiles del local, desembocó en una denuncia por estafa. Entonces, la Fiscalía no apreció razones para acusar y solo lo hicieron los compradores, que en 2014 optaron por no recurrir la sentencia absolutoria.