san sebastián - La red de apoyo a los presos de ETA Sare considera que en el último año y medio, tras la disolución de la banda terrorista, se han dado tanto “avances” como “atascos y retrocesos” en política penitenciaria y ha hecho un llamamiento para “llenar el vaso” que unos ven “medio lleno” y otro “medio vacío”.

Los representantes de esta organización Agus Hernan y Teresa Toda presentaron ayer en San Sebastián un informe que recoge datos de la situación actual de los reclusos de ETA adscritos al colectivo EPPK y de la que existía en junio de 2018.

Toman como referencia a los presos EPPK por ser con los que Sare “mantiene interlocución de trabajo” y los que “han expresado su disponibilidad a recorrer el camino de la legalidad penitenciaria”, ya que otros “o bien rechazan este camino o bien lo están desarrollando de manera individual”.

Según las cifras que facilitaron, en las cárceles españolas y francesas hay actualmente 246 reclusos de eso colectivo, 34 menos que en junio de 2018, de los cuales 128 se encuentran en primer grado y 31 de ellos “en régimen cerrado severo, similar al aislamiento”.

Hernan dijo que cuando Pedro Sánchez fue investido presidente interpretaron que se abría una “ventana de oportunidad” para la resolución de la “problemática” de los presos. - Efe