- Pedro Sánchez sigue buscando la cuadratura del círculo en sus alianzas, pero todo apunta a que va a necesitar un buen cincel y quizás tampoco así lo consiga. Tras haber sacado adelante la última prórroga del estado de alarma con los votos de sus socios de investidura, PNV y ERC, y también con Ciudadanos, que representa lo contrario en materia de autogobierno, el presidente español apostó el domingo por mantener esos "acuerdos transversales" en el futuro, en debates como los Presupuestos que se espera que negocie tras el verano. La coincidencia de esos tres partidos se interpretó como una carambola en toda regla en los círculos políticos, ya que al final tuvo que mediar una aclaración porque lo pactado con el PNV se contradecía con el texto de Ciudadanos, y el documento del partido naranja quedó aguado. La votación salió adelante y nada se rompió con ningún partido, pero quedaron en evidencia las dificultades. Ayer se le saltaron las costuras a esta hipotética suma por otro flanco: Ciudadanos vio muy difícil que Sánchez pueda contar con sus votos si mantiene las "medidas surrealistas" pactadas con Unidas Podemos.

No plantea cualquier cosa. Podemos comparte el gobierno con Sánchez y tiene ministros como el propio Pablo Iglesias. Cs deslizó que quiere que se reorienten algunas subidas de impuestos, y también vigila el cumplimiento del déficit, aunque se encuentra cómodo con este protagonismo y evitó cerrar la puerta al acuerdo aunque hubiera aumentos en la presión fiscal. Está por ver hasta qué punto es una escenificación de Cs de cara a la galería o si quiere presionar hasta el final con este debate, porque lo cierto es que en el caso de la prórroga de la alarma su pacto terminó descafeinado en la interpretación que se hizo de él, y aun así Cs siente cómodo si la fotografía final sirve para proyectar que tiene protagonismo pese a su caída a los infiernos con diez escaños. Cs ya tuvo que tragar, en el pasado, durante la etapa de Rajoy, con el pacto presupuestario con el PNV que incluía el Cupo.

La portavoz de la Ejecutiva de Cs, Melisa Rodríguez, fue quien lanzó ayer su aviso tras la reunión del Comité Permanente del partido: "Si los Presupuestos van estar marcados por las políticas surrealistas de Podemos, será muy difícil contar con nosotros". Tras la reunión que mantuvieron el viernes en Moncloa con el Gobierno español para hacer seguimiento de los pactos de la prórroga, aseguró que su partido solo se va a posicionar sobre las Cuentas cuando la Unión Europea establezca qué ayudas va a recibir el Estado y en qué condiciones, y cuando el Gobierno español presente un proyecto de Presupuestos "realista" que equilibre ingresos y gastos. Criticó que el pacto entre el PSOE y Podemos "solo hable de subir y subir impuestos" pero no de cómo emplear lo recaudado, y acusó también al grupo de Iglesias de "criminalizar a los autónomos" y de "hablar de los empresarios en general como malos". Dijo que en Ciudadanos no son "los mejores amigos de una subida de impuestos sine die, como defendieron el PSOE y Podemos" en 2018, y abogó por "reorientar" algunos tributos. En las últimas jornadas se ha dado alas al pacto con Ciudadanos, o incluso a la abstención del PP si Sánchez juega la baza de los fondos europeos o de su propio fondo para las autonomías, aunque el PP se sigue zafando con el argumento de que el socialista pacta con ERC y EH Bildu. Barones socialistas como el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, por su parte, se afanan en mantener viva la hipótesis. Vara retó a la derecha a hacer irrelevante el voto de ERC si le preocupa las contrapartidas que pueda obtener el independentismo.

Los socios de investidura de Sánchez, PNV y ERC, quieren que el socialista sea coherente, se centre en sus aliados y respete lo pactado. El vicepresident de la Generalitat, Pere Aragonès, precisamente uno de los negociadores del pacto de la prórroga de la alarma, avisó a Sánchez de que no puede pretender a la vez el apoyo de ERC y de Cs porque no es "coherente" y defienden posiciones "incompatibles". En los Encuentros Digitales de Europa Press, avisó sobre las Cuentas de que "o la salida a esta situación es una salida progresista y una salida en base a derechos individuales y colectivos, como el derecho a decidir de Catalunya, o es una salida neoliberal basada en la desigualdad y que paguen los de siempre". "La opción de la austeridad y los recortes es incompatible con ERC", dijo. Pidió a Sánchez que mantenga compromisos como la mesa de diálogo sobre el conflicto catalán para julio.

Cs no concretó que impuestos quiere reconsiderar, pero acaba de rechazar la Tasa Google en el Congreso. También criticó en su momento las subidas en IRPF y Sociedades, que no afectan a Navarra y la CAV por su autonomía fiscal.

"Será muy difícil contar con Cs para unas Cuentas con las políticas surrealistas de Podemos"

Portavoz de la Ejecutiva de Ciudadanos

"La opción de la austerirdad y los recortes es incompatible con ERC"

Vicepresident de la Generalitat catalana