- La Comisión Europea (CE) anunció ayer su intención de reformar el código de conducta sobre la fiscalidad en territorio europeo, unas guías no vinculantes que recogen compromisos de los Estados miembros para “reexaminar, enmendar o abolir” medidas fiscales que dañen la competencia.

Esta propuesta entra en una nueva batería de iniciativas sobre fiscalidad con vistas a intensificar la lucha contra las prácticas fiscales que distorsionan la competencia, mejorar el entorno para las empresas y simplificar los procesos para los contribuyentes.

La presentación de este paquete coincide con la histórica decisión del Tribunal General de la Unión Europea de anular la decisión de la Comisión que pedía a Irlanda recuperar 13.000 millones de euros más intereses en impuestos no abonados por la empresa estadounidense Apple a Dublín entre 2003 y 2014.

Bruselas cree que el código de conducta “debe ampliarse para cubrir todas las medidas que supongan un riesgo a la competencia fiscal justa”, incluyendo más tipos de regímenes fiscales y aspectos de los sistemas nacionales de impuestos de sociedades.

“Bajo el alcance actual del código, hay demasiados tipos de regímenes dañinos que quedan sin evaluar. Por ejemplo, el código solo revisa medidas y regímenes, pero los países están cada vez más usando las estructuras generales de sus sistemas fiscales, por ejemplo, otorgando reglas de residencia fiscal que pueden llevar a una doble no imposición o a exenciones para ingresos desde el extranjero”, señala la CE.