- La situación económica de Navarra ofrece algún indicador para un optimismo prudente. La Hacienda Foral hizo ayer públicos los datos de recaudación hasta septiembre, que con 2.517 millones son 270 millones menos que en el mismo periodo del año pasado, lo que supone un bajón del 9,7%, pero en cualquier caso una caída mucho menor que la que preveía el departamento de Elma Saiz en el mes de mayo, algo que deja algo de margen para pensar que la crisis puede no ser tan dura.

Hace cinco meses, la Hacienda denominó como "puñetazo" la proyección de una caída de 819 millones, el 20%, el peor escenario que se ha puesto encima de la mesa a consecuencia del parón industrial y económico provocado por la pandemia. Esas malas perspectivas, que forzaron al Gobierno a pensar en todas las posibilidades para sacar 1.000 millones de donde fuera -los 810 de la caída y los 200 que ha habido que gastar de más para afrontar la contingencia sanitaria- se mantuvieron hasta septiembre, cuando los datos de recaudación de agosto dieron un respiro y situaron la merma en una caída del 13,3% y 539 millones, una cifra mucho mejor que la proyectada. A ello contribuyó el buen ritmo de las exportaciones en una economía, la navarra, más parecida a la industrial europea -que se ha resentido menos- que a los servicios de otras comunidades del Estado. Y ahora, con los datos de septiembre en la mano que permiten "una comparación homogénea de los datos interanuales", según la Hacienda, se confirma una caída del 9,7% con respecto al año pasado. Es un golpe, pero qué duda cabe que mucho menor que el previsto hace unos meses, y deja un halo de esperanza para los meses de cierre de cuentas que están por venir, y que de inicio arrancan con un semiconfinamiento duro en Navarra.

Es la realidad que siempre se revela cuando se ofrecen los datos: el grueso de la recaudación siempre la sostienen las rentas del trabajo. La Hacienda Foral detalla que los ingresos por IRPF se han mantenido hasta septiembre casi igual que en 2019 (-0,8%).

Los datos negativos se producen en el resto de impuestos. Sociedades presenta malos números en todos sus componentes, con una abultadísima caída del 41% en los pagos a cuenta, y con una merma global del 7,4% en términos interanuales. La gestión directa del IVA también se ha visto afectada, con una disminución del 8,1%. Y los ajustes con el Estado a cuenta del IVA también bajan, de 710 a 510 millones, aunque este termina siendo un valor que suele encontrar ajuste en la negociación del Convenio Económico que ya se está llevando a cabo entre Navarra y Madrid. Con los impuestos especiales -gasolinas, tabaco, transportes, electricidad- ocurre que caen todos. Llama la atención la bajada en hidrocarburos, del 19,21%.

819

En mayo, la Hacienda Foral cifró el desplome de la recaudación en 819 millones, el 20%. Los datos de agosto corrigieron la cifra hasta los 538 millones.

270

La recaudación hasta septiembre -2.517 millones- es 270 millones menor que durante el mismo periodo del año pasado -2.788-.