- La Comisión Europea recibió ayer como “un paso en la buena dirección” la decisión del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de aparcar la propuesta de reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) promovida por PSOE y Unidas Podemos para dejar espacio a la negociación de cara a renovar el órgano de gobierno de los jueces. Sánchez anunció este impasse el pasado jueves, en su intervención final en el debate de la moción de censura presentada por Vox en su contra, como un ofrecimiento al presidente del PP, Pablo Casado, para negociar la renovación de los órganos constitucionales.

En lo que a las instituciones europeas se refiere, hace una semana el Ejecutivo comunitario expresó su preocupación por la propuesta de reforma para rebajar la mayoría necesaria para reformar el CGPJ, cuya renovación acumula dos años de retraso, y avisó a través de su portavoz de Justicia de que iba a observar “con atención” su desarrollo. En este sentido, advirtió de que no debe socavarse la independencia judicial y que España debe velar porque el CGPJ no sea percibido por sus ciudadanos como un órgano “vulnerable a la politización”.

El escenario cambió ayer de forma radical y el portavoz comunitario de Justicia, Christian Wigand, indicó en una rueda de prensa en Bruselas que “tomamos buena nota del anuncio del presidente español”. Añadió que “la Comisión ha expresado una clara posición sobre la propuesta al pedir que se garantice que el CGPJ no es percibido como vulnerable a la politización”, por lo que “suspender dicha propuesta y permitir más consultas es un paso en la buena dirección”.

El portavoz recordó que el comisario de Justicia, Didier Reynders, habló el miércoles por la tarde por teléfono sobre este tema con la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, a petición de ella, y que aprovechó para pedirle información adicional que Bruselas espera recibir “en las próximas semanas”. Wigand explicó ayer que durante la conversación la ministra no adelantó al comisario la intención de Sánchez de anunciar al día siguiente que paraba el reloj para dar espacio a la negociación con el PP.

El destinatario del gesto de Sánchez mantuvo ayer las espadas en alto, y así la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, dijo que “las condiciones del PP, somos serios y muy predecibles, siguen siendo exactamente las mismas”. Para sentarse a negociar, el partido de Casado exige retirar la reforma, excluir a Podemos del proceso y despolitizar la Justicia.