La derecha ha impedido que el Parlamento de Navarra respalde públicamente la campaña de fomento del euskera para 2020 de la iniciativa Euskaraldia, una propuesta que el año pasado consiguió miles de adhesiones y que se ha hecho popular por las chapas ‘ahobizi’ y ‘belarriprest’.

La Cámara ha rechazado hoy una declaración institucional que tenía mayoría suficiente para salir adelante (la apoyaban todos los grupos, y el PSN se ha abstenido), pero que en virtud de la reciente reforma del reglamento que obliga a las declaraciones institucionales a tener unanimidad para aprobarse, se ha quedado en la estacada.

Precisamente, por el voto en contra de Navarra Suma, la única formación que, paradójicamente, se oponía a modificar el reglamento porque temía que formaciones pequeñas pudieran frustrar sus iniciativas. Pues ahora ha ocurrido al contrario: es Navarra Suma la que ha hecho valer su capacidad de veto para tumbar el respaldo público a una iniciativa con arraigo social y que busca el fomento del euskera en la vida cotidiana.