El PNV votará en contra de que la Eurocámara levante la inmunidad parlamentaria al expresident Carles Puigdemont, al que el Tribunal Supremo quiere juzgar por su participación en el proceso independentista. Así lo adelantó ayer la eurodiputada jeltzale, Izaskun Bilbao, quien remarcó que siempre han defendido que los hechos que se juzgan tienen “carácter estrictamente político” y que no comparten “el planteamiento penal que se les ha dado”. Bilbao se pronunció en estos términos, en un encuentro telemático informativo organizado por Nueva Economía Fórum, respecto a la orientación de su voto cuando en el Pleno del Parlamento Europeo, que tendrá lugar a partir del 8 de marzo se vote el dictamen jurídico que avala retirar la inmunidad a Puigdemont y cuyo informe fue aprobado el pasado martes en comisión.

Al margen de lo que ocurra sobre si se reactivará o no la orden de extradición, la dirigente del PNV recordó que Puigdemont va a recurrir y “habrá que esperar a lo que se decida, pero creo que esta petición tiene que ver más con el objetivo político con el que vinieron algunos grupos, para ver qué ocurre si se le quita la inmunidad, que para lograr un objetivo político inmediato”.

En este sentido, el propio Puigdemont, así como los consellers Toni Comín y Clara Ponsatí, ya señalaron que recurrirán la decisión ante el Tribunal de Justicia de la UE en caso de revés plenario en la Eurocámara. Según el exJefe del Govern, existe “un objetivo compartido desde el PSOE hasta el fascismo de Vox, sin fisuras”, y ese objetivo es mandarlos a la cárcel. Si el Parlamento Europeo levanta la inmunidad, ninguno de los tres pierde su condición de eurodiputado: lo que ocurre es que se reactiva la euroorden y estarán a expensas de lo que decidan los tribunales del país en el que se encuentren. En el caso de Bélgica, la Justicia ya ha rechazado la del exconseller Lluís Puig por considerar al Supremo tribunal no competente.

Mientras, ERC y la CUP celebraron ayer una nueva reunión para avanzar en las negociaciones para un acuerdo de investidura y han perfilado posibles cambios en el modelo de los Mossos d’Esquadra, con propuestas como una moratoria en el uso de las balas de foam y la participación de la Brimo en los desahucios. Tras la reunión, ERC explicó que ambos equipos negociadores han profundizado en “propuestas a corto y a medio plazo para transformar el modelo de orden público catalán”, si bien la conselleria de Interior en estos momentos está en manos de Miquel Sàmper, de JxCat, que no ha participado en el encuentro.

Por su parte, la CUP destacó que se ha puesto sobre la mesa una “moratoria de las balas de foam y de la participación de la Brimo en los desahucios”, unos compromisos con los que según la formación anticapitalista “se pueden generar las condiciones para entrar en una negociación” sobre la investidura.