PAMPLONA. La Sección Tercera de la Audiencia de Navarra ha condenado a 2 años de prisión y 4 de inhabilitación absoluta al exsecretario del Ayuntamiento de Cintruénigo y de la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero como autor de un delito continuado de malversación de caudales públicos.

Al procesado, José María González Sesma, que en el juicio reconoció los hechos imputados por el fiscal, se le han estimado las atenuantes muy cualificadas de reparación del daño y dilaciones indebidas. La sentencia puede ser recurrida ante el la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

Según la sentencia, con anterioridad al año 1992, por parte de la Brigada de Obras del Ayuntamiento de Cintruénigo se venían realizando trabajos para la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero, siendo el acusado quien daba las órdenes correspondientes al personal encargado de realizar dichos trabajos y quien gestionaba el pago de los mismos.

Era él mismo quien, en su calidad de secretario de la Mancomunidad, emitía los cheques al portador para pagar los trabajos realizados y quien, en su calidad de secretario del Ayuntamiento, cobraba dichos cheques y disponía y decidía el destino que había que dar al dinero cobrado.

De la realización de estos trabajos no tuvo conocimiento el Ayuntamiento de Cintruénigo hasta finales del año 2006 "siendo, por tanto, el acusado quien los conocía y ordenaba", añade la sentencia.

En concreto, cuando la Brigada de Obras dependiente del Ayuntamiento de Cintruénigo era requerida por el acusado para realizar trabajos para la Mancomunidad que generalmente consistían en reparación de tuberías, se desplazaban varios trabajadores de la misma al lugar donde debía realizarse el trabajo llevando consigo el material correspondiente y perteneciente al Ayuntamiento de Cintruénigo.

Una vez que terminaban dichos trabajos, el jefe de la Brigada de Obras confeccionaba una 'nota de costes o nómina' en la que se reflejaba el trabajo realizado, el gasto ocasionado y las horas extraordinarias a percibir por los trabajadores.

Dicha 'nota de costes o nómina' era entregada por el jefe de la Brigada de Obras al acusado para que procediera al pago de la misma, quien, por una parte, una vez recibida dicha nota, "actuando en su calidad de secretario de la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero emitía, con cargo a la cuenta de la Mancomunidad, los cheques al portador necesarios para hacer frente al pago de dichos trabajos y, por otra parte, actuando en su calidad de secretario del Ayuntamiento de Cintruenigo, se encargaba de cobrar los cheques".

Una vez que el acusado tenía el dinero en su poder, "abonaba en metálico, en caso de que se hubiesen generado, las horas extraordinarias a los trabajadores, entregando al jefe de la Brigada en un sobre el dinero que por tal concepto correspondiera cobrar para que éste se encargara de repartirlo entre los trabajadores".

DINERO EN UNA CAJA B

Respecto al resto de la cantidad cobrada que, en todo caso, era dinero perteneciente al Ayuntamiento de Cintruénigo pues correspondía al trabajo desempeñado por trabajadores de dicha entidad con maquinaria perteneciente a la misma durante su jornada laboral, "en lugar de ingresarlo en la cuenta que el Ayuntamiento de Cintruénigo tenía abierta, la depositaba en una Caja Fuerte (Caja B), siendo él quien conocía su existencia y el que tenía su disposición".

El acusado actuó así hasta el mes de octubre de 2006, fecha ésta a partir de la cual los trabajos que la Brigada de Obras realizaba para la Mancomunidad se empezaron a facturar a través del Departamento de Intervención del Ayuntamiento, si bien, en el año 2007 aún existió alguna 'nota de costes' que fue cobrada directamente por el acusado de la misma manera en que lo hacía hasta el mes de octubre de 2006.

DESVÍO DE 27.235,77 EUROS

Según la sentencia, el acusado, durante los años 2002 a 2007, "aprovechándose de los cargos que como secretario desempeñaba en el Ayuntamiento de Cintruénigo así como en la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Fitero y Cintruénigo procedió a desviar de su legítimo destino una cantidad total de 27.235,77 euros, que no ingresó en la cuenta del Ayuntamiento sino que depositó en la caja fuerte, también conocida como caja B que él mismo tenía bajo su exclusivo conocimiento y disposición".

Al iniciarse las investigaciones para el esclarecimiento de estos hechos se procedió a abrir la llamada caja B, encontrándose en su interior un total de 18.000 euros cuya existencia conocía el acusado.

Como consecuencia de los hechos descritos, por parte de la Cámara de Comptos de Navarra se fiscalizó, por un lado, la contabilidad del Ayuntamiento de Cintruénigo y, por otro, la contabilidad de la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero.

Durante esta fiscalización se detectó la existencia de una cuenta corriente a nombre de la Mancomunidad que no estaba incluida en la contabilidad de la citada entidad.

Dicha cuenta fue abierta en enero de 1999 a nombre de la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero por el acusado, "siendo él la única persona autorizada para disponer de la misma, habiendo procedido a su cancelación el de junio de 2008, coincidiendo con la fecha en que la interventora del Ayuntamiento elaboró un informe que entregó al alcalde y en el que se reflejaba la existencia de la llamada caja B".

"ABUSO DE SU CARGO"

Dicha cuenta, "desde su creación hasta su cancelación, se nutrió exclusivamente de cantidades de dinero correspondientes a la Mancomunidad de Aguas que el acusado, abusando del cargo que ocupaba en dicha entidad, procedió a desviar a la misma, actuando con la única finalidad de obtener un propio e ilícito beneficio económico pues todas las cantidades que se ingresaron en dicha cuenta fueron dispuestas por aquel bien mediante cheques al portador bien mediante transferencias que realizó a favor de dos cuentas, una de ellas de la que el acusado era titular junto con su mujer y otra en la que figuraba como único titular su hijo".

La cantidad total de la que a través de dicha cuenta "dispuso y se apropió el acusado en beneficio propio y en perjuicio de la Mancomunidad de Aguas ascendió a 217.071,75 euros, si bien durante los años 2002 a 2008 realizó cuatro transferencias desde dicha cuenta bancaria a la cuenta que tenía abierta la Mancomunidad por un importe total de 59.137,38 euros".

Además, el 12 de marzo de 2009 el acusado procedió a ingresar en una cuenta de la Mancomunidad la cantidad de 157.934,37 euros en concepto de 'Reintegro de cantidad'.