ZARAGOZA. La delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, ha confirmado que la abogada asesinada en Zaragoza, supuestamente por un hombre al que defendió cuando éste asesinó a su mujer, en 2003, mantenían una relación sentimental.

Sánchez ha precisado, en una rueda de prensa convocada para informar sobre los detalles de este caso de violencia machista, que el entorno familiar de la víctima así lo ha declarado a los investigadores.

La abogada,Rebeca Santamalia Cáncer, de 47 años y madre de un hijo, había defendido a su presunto asesino, José Javier Salvador Cano, en el proceso por matar en 2003 de nueve tiros a su mujer en La Puebla de Híjar (Teruel), aunque la delegada del Gobierno ha asegurado que desconoce si seguían manteniendo relación profesional.

Según el relato de los hechos que ha hecho Sánchez, a las 21.00 horas de ayer el marido de la abogada avisó a la Sala 091 de Zaragoza de que su esposa no había regresado a casa, tras lo que agentes de la Policía hablaron con el entorno de Rebeca Santamalia y esta les encaminó hasta un domicilio de la calle Pradilla de la capital aragonesa, propiedad de su supuesto asesino.

Al no responder nadie ni al teléfono ni en el domicilio, los agentes localizaron a la hermana de José Javier Salvador Cano y entre las 4.00 y las 4.30 horas hallaron en el interior de la vivienda a la abogada asesinada "con evidentes signos de arma blanca".

Anteriormente, alrededor de la medianoche, un coche Z de la Policía Nacional había visto caminar por el viaducto nuevo de Teruel a un hombre que echó a correr cuando los agentes se dirigieron hacia él y que desapreció arrojándose al vacío.

El hombre, que llevaba gran cantidad de dinero encima, no portaba documentación pero fue identificado por las huellas como José Javier Salvador Cano, propietario del piso de Zaragoza en el que se encontró a Rebeca Santamalia.

Salvador Cano fue condenado en 2005 a 18 años de cárcel por el asesinato de su esposa, Patricia Maurel, a quien mató de nueve disparos en mayo de 2003 en La Puebla de Híjar (Teruel), pocos días antes de las elecciones municipales a las que ella concurría como cabeza de lista del PP.

La delegada del Gobierno ha recordado que el hombre estuvo preso en la cárcel de Teruel entre 2003 y 2013, año en el que fue trasladado al Centro de Inserción Social (CIS) de Zuera (Zaragoza), donde trabajaba y dormía en prisión, hasta que en enero de 2017 salió en libertad condicional.

Desde entonces eran los servicios sociales los que se encargaban de su seguimiento y entrevistas y en 2021 hubiera logrado la libertad definitiva.

Sánchez, quien ha recalcado que "no hay causas para matar a una mujer", ha asegurado que desconoce si el presunto asesino había seguido cursos de reeducación penitenciarios.

Con este nuevo crimen machista, ya son tres las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año. En 2018 fueron asesinadas 47 mujeres y 978 desde que en 2003 empezaron a contabilizarse los crímenes machistas.

El primer asesinato de 2019 ocurrió el pasado 3 de enero cuando una mujer dominicana de 26 años fue apuñalada supuestamente por novio en Laredo (cantabria), y el segundo ocurrió el 12 de enero cuando una mujer de 47 años fue acuchillada en su vivienda en Fuengirola (Málaga) por su expareja, un alemán que fue detenido.

Además, hay otros cinco casos en investigación policial y en los que no se descarta ninguna hipótesis.

Son los de la joven paraguaya Romina Celeste, desaparecida en Lanzarote y cuyo marido sostiene que no la mató, sino que la encontró muerta y se deshizo de su cadáver; el de una anciana de 95 años agredida por su marido en la residencia en la convivían en Toral (León), y el de una alemana, cuyo cuerpo fue hallado junto al de su marido en su casa de Llucmajor, ella tumbada sobre la cama y él ahorcado en el pasillo.

Además, el pasado miércoles apareció una mujer carbonizada en un coche en Tenerife y la policía investiga a un hombre que vaiajaba con ella y que está ingresado con quemaduras graves y se investiga si mantenía una relación sentimental con la víctima.

El mismo día, 17 de enero, fue hallado el cadáver de una joven de Guadalajara, de 25 años, con heridas de arma blanca en el municipio madrileño de Meco, un caso en el que se sigue investigando la autoría.

Su cuerpo fue encontrado en el campo, donde había salido a pasear con sus perros y, de momento, no se han aclarado las circunstancias ni el móvil del crimen.