“los cánceres son enfermedades con múltiples causas y factores que requieren para su prevención articular un amplio conjunto de medidas tanto políticas, legislativas, laborales, medioambientales y también personales. El Código Europeo contra el Cáncer marca las medidas que las personas podemos adoptar para prevenirlo”, explicó ayer Margarita Echauri, jefa de la sección de Promoción de la Salud del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, que ha editado 80.000 ejemplares de este código en castellano y en euskera, los cuales se encartarán el 10 de febrero en cuatro periódicos, entre ellos DIARIO DE NOTICIAS, y se distribuirán en distintos espacios sociosanitarios.

La Organización Mundial de la Salud estima que entre un 30% y un 50% de los casos de cáncer son evitables y, con la vista puesta en la prevención, Salud proporciona doce recomendaciones. En primer lugar, aconseja no fumar ni consumir ningún tipo de tabaco, ni cigarrillos electrónicos... además de hacer de la casa, el coche y los espacios deportivos lugares sin humo. En este sentido, Echauri comentó que el tabaco “aumenta entre un 20-25% la probabilidad de desarrollar cáncer de pulmón”, que es la primera causa de muerte prematura o muerte en población menor de 75 años en Navarra, responsable del 15% y el 11% de los fallecimientos en hombres y en mujeres.

Asimismo, recomienda mantener “un peso saludable”; “hacer ejercicio físico a diario”; y “comer saludablemente”, consumiendo suficiente cantidad de cereales integrales, legumbres, frutas y verduras, limitando los alimentos hipercalóricos, con mucha sal y el consumo de carne roja y evitando las bebidas azucaradas, así como la carne procesada. Aconseja “limitar o evitar el consumo de alcohol”; no exponerse al sol “excesivamente”, sobre todo en la infancia, ni usar cabinas de rayos UVA; protegerse de los agentes cancerígenos, especialmente en los lugares de trabajo; y averiguar si está expuesto a la radiación de radón en su domicilio.

Finalmente, recomienda a la mujer “amamantar al bebé” porque “la lactancia materna reduce el riesgo de cáncer de mama” y “limitar el tratamiento con terapia sustitutiva hormonal para la menopausia”; vacunar a los recién nacidos con la hepatitis B y a las niñas del virus del papiloma humano; y participar en los programas organizados de cribado del cáncer (colorrectal, de mama y cervicouterino), puesto que la detección precoz es una herramienta muy efectiva para controlar algunas enfermedades, entre ellas también el cáncer.