valladolid - Quince personas, trece hombres y dos mujeres, fueron detenidas ayer en Valladolid en una operación que la Policía Nacional y la Agencia Tributaria mantienen abierta por una supuesta estafa en la que, al parecer, empleados de la empresa funeraria El Salvador incineraban a los fallecidos en ataúdes más baratos y de peor calidad que los comprados por las familias. También se investiga si la empresa reutilizaba flores y coronas.

La operación comenzó a las 08.00 horas de ayer, por lo que, mientras al tanatorio acudían allegados de los fallecidos en las últimas horas para velar los cadáveres, los agentes se incautaron de media docena de cajas con documentación pendiente de investigar, por lo que no se descartan nuevas detenciones. Además, los agentes realizaron registros en las dependencias que la empresa tiene en la céntrica calle Angustias, en la capital, así como en otra en el municipio vallisoletano de Santovenia.

También se produjeron registros domiciliarios simultáneos en las viviendas donde viven algunos de los detenidos, entre los que se encuentran cuatro miembros de una misma familia vinculada a la propiedad de esta compañía.

“Desde siempre la empresa ha mantenido unos rigurosos controles que aseguran y garantizan la total transparencia en los procesos de incineración”, defendió la empresa funeraria, que detalló que todos los crematorios del Grupo El Salvador cuentan con salas “desde las que los familiares pueden ver cómo el ataúd entra en la zona de cremación”.

La empresa achacó la raíz del caso a un chantaje económico de un exempleado en 2017, que pidió dinero por no revelar “prácticas irregulares que él, supuestamente, habría cometido”, tras lo que el Grupo El Salvador presentó una denuncia ante la Policía Nacional por un posible delito de extorsión, juicio tras el cual el extrabajador, jubilado en febrero de 2015, fue condenado a un año de prisión.

bajo secreto de sumario No obstante, tras la denuncia se inició una investigación llevada a cabo por el grupo de Homicidios de la Policía, la cual se encuentra todavía bajo secreto de sumario. Los agentes no saben cuántos años podría llevar la empresa realizando estas prácticas, ni cuántas familias puede haber implicadas, pero calculan que el fraude “puede ser millonario”, debido a los altos costes que suponen un funeral.

Abierta en 1985 y con “más de 30 años ofertando servicios mortuorios integrales en la capital vallisoletana, así como en el resto de la provincia”, como se anuncian en su página web, el Grupo El Salvador es la empresa funeraria más importante de Valladolid, ya que cuenta con cinco tanatorios en distintas localidades de la provincia (Valladolid, Medina de Rioseco, Tudela de Duero, Peñafiel y Mojados), así como otros tres en construcción (Tordesillas, Olmedo y Laguna de Duero).

La Delegación del Gobierno indicó que, cuando concluya esta fase de la investigación, convocará una rueda de prensa y ofrecerá detalles sobre el caso, así como el número final de detenidos. Por su parte, la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef) exigió la depuración de responsabilidades, “en el caso de que se probara la veracidad de las prácticas publicadas e investigadas”, ya que “este tipo de actos no solo dañan la imagen del sector funerario, si no que causan un profundo dolor a las familias implicadas”. - Efe/E.P./D.N.