málaga - La defensa de David Serrano, el dueño de la finca de Totalán, donde está el pozo al que cayó Julen, presentó ayer en el Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga un informe que “permite presumir” que su muerte “se pudo producir durante las labores de rescate”, y en el que se apunta que podría ser el uso de una piqueta en las primeras horas de las tareas lo que explique sus heridas. Dicho informe, encargado por la defensa a un arquitecto que colabora con los abogados, señala que “los diez impactos de la piqueta, entre las 17.30 y las 21.00 horas del día del incidente -el 13 de enero- son lo único que físicamente pudo producir las heridas en la cabeza y cráneo”. Recuerda que los forenses dictaminan que el fallecimiento se produjo “como consecuencia de un traumatismo que afectó a la zona temporal y fronto-temporal”, y “esa zona difícilmente pudo recibir un impacto de esa magnitud durante la caída”. - E.P.