pamplona - La población residente en Navarra aumentó durante el año 2018 en 6,100 personas y se situó en 649.966 habitantes a 1 de enero de 2019. A pesar de las cifras, la población registró un saldo vegetativo negativo de 427 personas, pero quedó compensado por la migración, según los datos provisionales de la Estadística de Migraciones del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La población creció durante el pasado año en 13 comunidades autónomas. Navarra se sitúa en quinto lugar con uno de los mayores incrementos: 0,95%. El aumento poblacional de 2018 fue fruto de un saldo vegetatvo negativo compensado por un saldo migratorio positivo (hubo 5.822 inmigraciones procedentes del extranjero y 724 de distintas comunidades autónomas).

Desde el año 2016, el crecimiento de la población se sustenta en la llegada de extranjeros. La inmigración es, por el momento, la única solución a la incesante caída de la natalidad en el Estado, que en la última década se ha desplomado un 30%, consolidando la crisis demográfica que año tras año convierte a España en un país cada vez más envejecido.

La llegada de inmigrantes al Estado en 2018 compensó el aumento de las defunciones y la caída de la natalidad, registrándose el mayor aumento poblacional desde 2008 (276.186 personas más). La población total se sitúa en 46,93 millones de habitantes, la mayor cifra desde 2012 cuando vivían aquí 46,82 millones.

2018 se ha convertido en el tercer año de crecimiento ininterrumpido de la población española, que aumentó en 86.940 personas en 2016 y en 131.408 en 2017, tras cuatro años consecutivos de caídas (2012 -con 90.326 ciudadanos menos-, 2013 con 215.691, 2014, con 62.634 y 2015 con 9.466 habitantes menos). Explica el INE que el crecimiento de la población española en 2018 se debió al aumento de los habitantes extranjeros, ya que los de nacionalidad española se redujeron.

más extranjeros En este último año ha crecido el flujo de entradas y salidas del país. El saldo entre las personas que se establecieron en España (643.037, un 21% más que en 2017) frente a las que abandonaron el país (309.365, un 16% menos) fue positivo en 333.672 personas.

Así, el número de extranjeros aumentó en 285.554, hasta los 4,85 millones a 1 de enero de 2019 debido, en gran medida, a un saldo migratorio positivo de 330.197 personas. Por el contrario, la población de nacionalidad española se redujo en 9.368 personas. Esta evolución fue resultado de un saldo vegetativo negativo (de 102.682 personas), que no se vio compensado ni por el saldo migratorio positivo (3.475 personas) ni por las adquisiciones de nacionalidad española (que afectaron a 90.828 personas, según datos provisionales). Si solo se contabiliza a los nacidos en España, el pasado año la población se redujo en 98.595 personas.

Todas las comunidades autónomas presentaron saldo migratorio positivo con el exterior durante el año 2018. Los mayores se dieron en Catalunya (83.762), Comunidad de Madrid (73.126) y Comunitat Valenciana (32.054). Por el contrario, las comunidades con menores saldos fueron La Rioja (1.406), Extremadura (1.551) y Cantabria (2.465).

La población extranjera mayoritaria sigue siendo la marroquí, con 714.239 ciudadanos viviendo en España, seguida de la procedente de Rumanía (671.233), Reino Unido (287.292), Italia (244.148), Colombia (199.540) y China (190.624).

inmigración española Además del inmigración, España se ha enfrentado a la emigración de su población. De las 309.365 personas que abandonaron el país en 2018, un 17,8% siempre habían residido en el Estado. El resto (82,2%) habían inmigrado en algún momento.

Durante 2018 se fueron 80.253 personas, lo que supone el dato más bajo de emigración desde 2013. Un 20% de emigrantes españoles se fue a Reino Unido; un 12,2% a Francia; un 10,5% a EEUU; y un 7,6% a Alemania. - D.N.