pamplona - Tan sólo el 18% de las personas que se presentaron a la primera parte de la fase de oposición de la OPE de Maestros han resultado aptas y están siendo convocadas (o lo harán en los próximos días) a la siguiente fase, que consiste en la presentación de la programación y la unidad didáctica. La “sangría”, en palabras de muchos opositores, ha sido muy importante. Tanto es así que en dos especialidades (Audición y Lenguaje y Pedagogía Terapéutica) el número de aptos en ambos idiomas no cubre las plazas ofertadas por lo que el departamento de Educación deberá recurrir al personal interino. El porcentaje de aprobados provisionales en euskera se sitúa en el 23,2% frente al 15,1% de aptos que se registran en las pruebas de castellano.
La primera fase de oposición, que consiste en un examen teórico y un caso práctico, ha dejado ya a miles de aspirantes sin opción de lograr una plaza fija en el sistema educativo navarro. De hecho, según datos de Educación, el número de opositores admitidos en la OPE fue de 6.088 si bien como algunos se presentaron en más de un idioma y/o especialidad, el número de ejercicios inscritos fue de 8.085. Como suele ocurrir, la cifra de pruebas realizada fue menor (6.910) y de ellas sólo 1.250 lograron el aprobado.
por idiomas y especialidades Por idiomas, de los 4.410 exámenes realizados en esta primera fase de oposición tan sólo han logrado pasar a la parte oral un total de 669, es decir, el 15,1%. Por su parte, en euskera, se registraron 2.500 ejercicios con un porcentaje de aptos del 23,2% (581).
Un análisis por las distintas especialidades pone de manifiesto que, en castellano, Inglés presenta el menor porcentaje de aptos (8,2%) seguido de Pedagogía Terapéutica (10,5%). La otra cara de la moneda es Música, con un 24,4% de aprobados, y Educación Infantil, con un 17,6%. En el caso de los aspirantes que realizaron la OPE en euskera, la especialidad de Vascuence, con un 11% de aptos, y la de Inglés, con 12,4%, son las que registran la mayor criba mientras que Música, Pedagogía Terapéutica y Educación Infantil obtienen los mejores resultados: 32,7%, 29,4% y 26,5% de opositores aprobados respectivamente.
segunda fase, parte oral Una vez realizada esta primera fase de oposición, y analizadas las reclamaciones, los docentes aptos pasan a la segunda fase que consiste en la defensa de la programación didáctica y de la unidad didáctica. Deben superar ambos ejercicios.
La nota final de la oposición será la media aritmética de las puntuaciones obtenidas en las dos partes, siempre y cuando hayan sido superadas las cuatro pruebas.
A dicha nota se le agregarán las puntuaciones de la fase de concurso (experiencia, formación, y otros méritos). La ponderación de las calificaciones de las fases de oposición y concurso para formar la nota global serán dos tercios para la primera y un tercio para el concurso.
descontento de ambas partes Ante el bajo porcentaje de aprobados provisionales de la primera parte de la OPE, desde LAB recordaban la ausencia de criterios “específicos, claros y transparentes” para la evaluación de los exámenes, de los que estaban recibiendo múltiples quejas y consultas por parte de afectados y personal de tribunales. Nora Salbotx, de LAB, tildó ayer estos resultados como “un fracaso del proceso de la oposición”, tanto por no cubrir la totalidad de las plazas vacantes en algunas especialidades como por “la falta de entendimiento” y explicaciones de los criterios de corrección, ya que “no es falta de profesionalidad de las personas que forman los tribunales ni falta de formación de los opositores”, sino que es “falta de criterios específicos”, porque “no es normal que disten tanto las expectativas de opositor/a y examinador/a”.
Desde LAB señalaban el “mal funcionamiento organizativo” de la OPE para la que, en reunión con Educación en agosto de 2018, solicitaron que los tribunales se formaran en octubre, así como cursos públicos de formación para opositores.
asignación de plazas docentes
Los ‘concursillos’, la 2ª quincena de agosto. Los maestros que aprueben con plaza el concurso-oposición deberán elegir destino en un acto público, conocido como concursillo, que tendrá lugar la segunda quincena de agosto. Estos docentes trabajarán el próximo curso como funcionarios en prácticas. En aquellas especialidades donde no se cubran las plazas se recurrirá a listas de interinos. Una vez eligan destino los nuevos maestros y los funcionarios sin destino definitivo llegará el turno del personal interino. A pesar de las críticas sindicales, Educación también ha retrasado al mes de agosto los concursillos de Secundaria y Formación Profesional. De nuevo, en estas etapas, primero elegirán plaza los funcionarios sin destino definitivo y, despúes, los interinos.
