Con respecto al artículo de Xabier López de Uralde, del colectivo Irauli, que bajo el título de “¿Quiénes fueron víctimas en el franquismo?” publicaba el día 27 este medio de comunicación, me gustaría destacar tres frases del mismo. (Para quien no lo sepa, el colectivo Irauli propugna, para el monumento a los Caídos de Pamplona, un futuro que va más allá que la resignificación propuesta por el ayuntamiento, sin derribarlo.)
Dice el Sr. López Uralde en su artículo:
1.- “Pretendemos convertir su intención apologista en denuncia de sus crímenes…”.
Según la RAE, convertir es hacer que alguien o algo se transforme en algo distinto de lo que era. Entonces, me pregunto: ¿convertir no es sinónimo de cambiar, en definitiva, de resignificar?
2.- “Sin la presencia cotidiana de sus símbolos se pierde la huella de los actuales poderes fácticos franquistas. Su eliminación no pedagógica ayuda a invisibilizar esos poderes fácticos”.
¿Para qué ha servido entonces toda la labor de eliminación de los símbolos fascistas/franquistas de nuestras calles? ¿Habrá que volver a reponerlos para hacer pedagogía antifascista?; y
3.- “Nuestro colectivo (Irauli) propone construir un memorial que denuncie a los fascismos y se levante a favor de los derechos humanos universales, en el mismo lugar donde quisieron significar su supresión a través de una Cruzada”.
En definitiva, si se pretende construir un memorial en el lugar donde (los fascistas/franquistas) quisieron significar (y significaron, añadiría yo) la supresión de los derechos humanos universales, sin derribar el monumento, toda la intervención se puede resumir en una sola palabra: resignificación.
O reducido a dos preguntas:
Pregunta: ¿es preciso, según el Sr. Xabier López de Uralde, y necesario mantener en pie el mamotreto para construir en su interior un memorial?
Respuesta: Sí.
Pregunta: Para “construir un memorial que denuncie a los fascismos y se levante a favor de los derechos humanos universales”... ¿tiene que ser precisamente ese monumento, que significó y seguirá significando la supresión de los derechos humanos universales, quien lo acoja? ¿No puede ser otro edificio que no esté contaminado, porque ese edificio seguirá siendo lo que es, un homenaje de Navarra a sus muertos en la Cruzada, y que nos evite el trabajo de tener que hacer sobre él pedagogía?
Respuesta: El lector o lectora sabrá sacar sus conclusiones.