Roma - El Papa se ha mostrado contrario a la prisión permanente al subrayar la necesidad de que toda sociedad “garantice que el castigo no comprometa el derecho a la esperanza y que se garanticen las perspectivas de reconciliación y reintegración”. “La prisión perpetua no es la solución a los problemas y lo repito: no es la solución de los problemas, sino un problema a resolver. Porque si se encierra la esperanza, no hay futuro para la sociedad. Nunca se debe privar del derecho a empezar de nuevo”, señaló el pontífice. - E.P.