PAMPLONA - Alcaldes y alcaldesas de localidades afectadas por la carretera N-121-A acogieron ayer con cierta sorpresa la decisión del Gobierno de Navarra de acometer el desdoblamiento de los túneles de Belate y Almandoz en vez de optar por construir galerías de evacuación. Todos ellos coinciden en reclamar al Ejecutivo foral que se les tenga en cuenta en la toma de decisiones por representar a los vecinos que utilizan mayoritariamente la vía Pamplona-Behobia.

La alcaldesa de Sunbilla, Amets Inda, insistió ayer en que “nosotros siempre hemos pedido es que prime la seguridad de los usuarios y por desgracia muchas veces se anuncian muchas cosas sin mayor concreción”. En este sentido reclamó que los Ayuntamientos puedan trabajar junto con el Gobierno para buscar soluciones consensuadas a los problemas de la N-121-A. “Hemos pedido que se cree una mesa de trabajo para hablar de la seguridad de los túneles y de toda la carretera. Nos gustaría que pudiésemos participar en las decisiones”, subrayó Inda.

El alcalde de Doneztebe, Santi Uterga, recibió con satisfacción el desdoblamiento de los túneles, “porque resolvería unos de los problemas que tenemos”, pero advirtió que “seguimos teniendo una carretera insegura, con muchos tramos peligrosísimos. Sin ir más lejos las últimas dos semanas hemos tenido seis accidentes entre Almandoz y Bera”, advirtió, y añadió que “el proyecto 2+1 no nos convence y nos gustaría que el Gobierno trabajase con nosotros para buscarle una solución conjunta a la carretera. Somos los que defendemos a los usuarios, que son los que más se la juegan todos los días, nuestra opinión debería ser importante y tenemos la sensación de que no se nos tiene en cuenta”, lamentó.

La alcaldesa de Olaibar, Mª Carmen Lizoain, comentó que “aunque parecía que el Gobierno ya se había decantado por hacer las galerías de evacuación, si finalmente se desdoblan los túneles será una buena noticia. Era algo prácticamente inviable, porque nos decía que no había dinero, pero duplicar los túneles solucionaría definitivamente el problema de la seguridad en ellos”. No obstante, resaltó que “la carretera sigue teniendo muchos problemas de seguridad y la pregunta es si es buena idea dedicar tanto dinero a construir dos nuevos túneles en Belate y Almandoz”. Pidió al Gobierno de Navarra que “nos mantenga informados como vecinos y afectados para intentar consensuar lo que se pueda”.

El alcalde de Ezcabarte, Pedro Lezaun, también incidió en que “ya que somos los más cercanos a los problemas de la N-121-A, nos gustaría que nos tuviesen en cuenta o al menos que nos escuchen” y mostró su asombro por la decisión del Gobierno de Navarra de construir dos nuevos túneles con un coste superior a los 100 millones de euros. “Siempre se nos ha dicho que no había dinero y ahora nos sorprende que se plantee esta obra millonaria. Hasta ahora no había dinero ni para parchear las carreteras, así que estamos muy sorprendidos”, manifestó Lezaun, quien admitió que “los túneles en su estado actual son un problema”, pero presagió que el tráfico pesado puede acrecentarse con la reforma de la carretera “porque puede haber un efecto llamada”. “Por eso tiene que acordarse una actuación conjunta, no solo con el objetivo de cumplir la normativa europea”, concluyó.