- El número de incendios urbanos e industriales registrados en Navarra durante los meses de marzo y abril han experimentado un descenso del 27% en comparación con el mismo periodo de 2019: los miembros del Servicio de Bomberos del Gobierno de Navarra han atendido un total de 136 sucesos, frente a los 188 que hubo el año pasado.

El cese de la actividad de las empresas como consecuencia de la pandemia del covid ha repercutido directamente en el descenso del número de incidentes producidos, mientras que el confinamiento de la población en sus casas ha supuesto que también hayan disminuido los actos vandálicos (quema de contenedores) y que los daños causados por las llamas en los domicilios haya sido menor, al poder alertar del suceso los moradores con mayor celeridad. Así lo destacan fuentes del Servicio de Bomberos del Gobierno de Navarra, que durante el mes de marzo atendieron 67 incendios de tipo urbano o industrial, y otros 69 durante el mes de abril, cifras que son inferiores a los 105 y 83 fuegos que se registraron en marzo y abril del año pasado, respectivamente.

El parque de Bomberos que intervino en más incendios en este periodo fue el central de Cordovilla (37, frente a 51 en marzo-abril de 2019), seguido por los parques de Pamplona-Trinitarios (21, frente a 44), Tudela (17, frente a 20), Estella-Lizarra (15, frente a 11), Oronoz (10, frente a 12), Peralta (8, frente a 8), Alsasua (7, frente a 14), Tafalla (6, frente a 6), Burguete (6, frente a 5), Lodosa (5, frente a 8), Navascués (4, frente a 3) y Sangüesa (0, frente a 6).

La variación de este año, cifrada en 42 fuegos menos (-27%), "se debe sobre todo al descenso en el número de incendios industriales, ya que la mayor parte de las empresas han permanecido cerradas más o menos tiempo", indican desde el Servicio de Bomberos del Gobierno de Navarra. Estas mismas fuentes añaden que "la cifra de incendios urbanos se mantiene en valores similares a los del año pasado, aunque sí se han quemado menos contenedores gracias al confinamiento, que ha repercutido en un descenso de los actos vandálicos".

Los Bomberos resaltan que "los incendios urbanos registrados en estos meses han sido menos graves que otros años, porque al estar la ciudadanía recluida en sus domicilios se da cuenta rápidamente de que algo ocurre, por ejemplo, por el olor a humo, lo que hace que puedan dar aviso del fuego e incluso apagarlo, como ha ocurrido en bastantes casos, antes de que adquieran grandes dimensiones. Al respecto, estas fuentes precisan que "predominan los incendios con origen en la chimenea del fogón, como es habitual en los meses invernales, y los ocurridos en la cocina".