El Instituto Navarro de la Juventud (INJ), organismo dependiente del Departamento de Vivienda, Juventud y Políticas Migratorias del Gobierno de Navarra, ha celebrado el acto de entrega de los Premios TFG-TFM donde se han reconocido trabajos universitarios que destacan por su calidad, rigor metodológico y por abordar desafíos sociales de primer orden para la juventud navarra.
Estos reconocimientos buscan incentivar a los estudiantes a realizar trabajos de investigación que aborden temas relevantes sobre la juventud, sus necesidades, problemáticas y potencialidades además de estimular su interés por implicarse en cuestiones sociales y comunitarias que afectan directamente a su colectivo, alentando una actitud proactiva y de responsabilidad cívica.
El primer premio al Trabajo Fin de Grado, dotado con 1.500€, ha sido otorgado a Irati Maestrojuan Viedma, de Pamplona, autora de Explorando nuevos modelos residenciales en Navarra. Exclusión juvenil y viviendas colaborativas; un análisis sobre las potencialidades de los modelos colaborativos de vivienda. Con un marco teórico sólido e interdisciplinar, entrevistas a agentes clave y una perspectiva interseccional que incorpora clase social, origen y género, el trabajo ofrece un retrato detallado de la precariedad habitacional y propone medidas concretas para avanzar hacia las viviendas colaborativas.
El estudio analiza el potencial del cohousing (modelo de vivienda colaborativa donde un grupo de personas vive en un complejo con casas o apartamentos privados pero comparte intensamente espacios comunes) para generar comunidad, cuidados y arraigo pero también destaca como las dificultades de su generalización a capas sociales más amplias ya que ahora mismo quedan excluidas a minorías con capital suficiente.
Las tres investigaciones, desde ámbitos distintos pero convergentes, ponen de relieve la capacidad de la juventud investigadora para situar en el centro debates urgentes: la participación política, el impacto de los modelos de gestión pública y el acceso a la vivienda. Además, subrayan la importancia de incorporar la mirada juvenil en la toma de decisiones y en el diseño de políticas públicas más equitativas.
El primer premio al Trabajo Fin de Máster ha sido para Iker Teres Flamarique, de Ayegui, cuyo trabajo Lo comunitario y lo institucional en la gestión de los servicios públicos: el caso SAPC-Coworkids en Pamplona-Iruñea, dotado con 1.500€, analiza la transición del modelo de los Servicios de Acción Preventiva Comunitaria (SAPC) al programa Coworkids en Pamplona-Iruña, poniendo el foco en la gobernanza, el conflicto y la participación infantil y juvenil aplicado a este escenario concreto.
Según el estudio, la municipalización unilateral del servicio, sin contar con las asociaciones comunitarias, expresa una dinámica en la que el poder político reconfigura las reglas del campo, deslegitimando prácticas previas de construcción comunitaria. Además, el trabajo concluye que la sustitución de los SAPC por COworkids supone un retroceso que trasciende las esferas de participación ciudadana o la coproducción de lo público, afectando directamente en la promoción de la diversidad lingüística como parte del patrimonio cultural vivo de la ciudad.
El jurado ha valorado la precisión de los objetivos de este estudio, las entrevistas y documentación pública, así como la calidad formal y analítica de un estudio que combina teoría y práctica de manera profunda.
El Accésit al Trabajo Fin de Grado que ha sido dotado con 500 € ha recaído en la pamplonesa Ane Alava Artuch, autora del estudio Gazteriaren parte-hartze militantea nafarroako alderdi politikoetan. PSN-ren kasuaren azterketa. Un estudio en euskera sobre la participación militante de la juventud en los partidos políticos de Navarra en la que constata la desafección de la juventud por la política institucional, no así por la política general, ya que se comprueba su participación a través del activismo, el consumo responsable o la acción colectiva a través de redes sociales, lo que lleva a desarrollar una visión más amplia y renovada de la política que, según el trabajo, debería ser reconocida por administraciones y partidos políticos.
Asimismo, se plantea el uso de las redes sociales para facilitar y acercar la información; el aumento de la transparencia y la burocracia en la e-gobernanza; o la apertura de foros para vincular la consulta, el diálogo y el debate social y político con el trabajo institucional como algunas de las soluciones.
El tribunal ha valorado la claridad con la que delimita el sujeto de estudio, la diversidad de voces recogidas y la pertinencia de reflexionar sobre la desafección hacia la política institucional mientras que subraya las nuevas formas de participación política juvenil.