- Los planes del Gobierno de Navarra de implantar peajes para camiones en cinco carreteras para financiar el mantenimiento y obras como el desdoblamiento de los túneles de Belate y Almandoz se enfrentan al "rechazo frontal" del sector del transporte navarro, representado por las asociaciones Tradisna y Anet, que también cuestionan que no se prevea cobrar a todo tipo de vehículos.

Tanto Alberto Latorre, coordinador de Tradisna (Asociación de Transportistas Autónomos de Navarra), como Ignacio Orradre, secretario general de Anet (Asociación Navarra de Empresas de Transporte), mostraron ayer su malestar por la envergadura de la propuesta del Ejecutivo, que prevé implantar peajes en todas las autovías no concesionadas, además de en la N-121-A. "El anterior Gobierno hizo sus estudios para ver la posibilidad de instaurar peajes, pero no nos esperábamos la magnitud de esta propuesta", señaló Latorre. "Cuando mantuvimos conversaciones sobre la N-121-A y hablamos de la financiación para desdoblar los túneles, se comentó la posibilidad de poner un peaje, pero nos ha sorprendido que ahora se plantee para cinco vías", corroboró Orradre.

Los representantes del sector temen que el Gobierno ya haya tomado la decisión de implantar los peajes y que su margen de participación sea mínimo. "Nos han transmitido que quieren contar con nosotros para concretar las ubicaciones más adecuadas para los peajes, pero poco más", admitieron, para añadir que el Ejecutivo también quiere "ver la manera en la que se pueda beneficiar a los transportistas navarros frente al resto, pero es algo complicado por las experiencias que ha habido en la CAV".

Tras asegurar que "el sector del transporte ya aporta unas cantidades muy respetables a las arcas públicas", Latorre y Orradre cuestionaron "el argumento de que el que contamina, paga. Por la carretera andan muchos vehículos, no solo los camiones", para advertir de que "el coste de los peajes repercutirá en el precio del producto que pagan los consumidores".