El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla, ha avanzado que el decreto que hará obligatorio el uso de la mascarilla en la región se firmó y publió este mismo miércoles, ya que a su juicio es "imprescindible" respetar esta medida de seguridad.

Así lo ha anunciado Revilla durante el discurso que ha ofrecido en un acto de reconocimiento al operativo de lucha contra incendios forestales, celebrado en Ruente, en el que ha trasladado a los asistentes que la situación en España "no está tan mal" gracias a colectivos como el suyo.

Además, ha destacado que la mascarilla es "el remedio hasta que salga la vacuna" contra el coronavirus, que ha confiado en que estará lista para el mes de diciembre por la cantidad de dinero que se está invirtiendo en su búsqueda.

Una vez más el presidente ha explicado que la mascarilla frena los contagios y que, en el caso de producirse, la carga viral que se transmite es menor, lo que supone que la mayoría de los infectados tengan una sintomatología leve y ya no requieran hospitalización.

En este sentido, ha comparado las cifras actuales del virus en Cantabria, con sólo dos ingresados y 28 activos, con las de días en los que llegó a haber 610 ingresados y "la mitad" necesitaban ir a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Por ello, ha insistido en que "el que lleva mascarilla es una persona solidaria y el que no la lleva no lo es".

No obstante, ha destacado la preparación de la que dispone ahora la región para afrontar nuevos casos que puedan surgir, con un equipo de 54 rastreadores que se encargan de detectar y hacer pruebas a las personas con las que los infectados han tenido contacto estrecho para evitar la propagación del virus.

El Gobierno regional ha publicado en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) la orden por la que se hace obligatorio el uso de mascarilla en esta Comunidad Autónoma.

La medida, que entra en vigor este mismo miércoles, 15 de julio, afectará a las personas mayores de seis años y se aplicará en la vía pública, espacios al aire libre y en cualquier lugar cerrado de uso público o abierto al mismo, con independencia de que pueda garantizarse una distancia interpersonal mínima de 1,5 metros.

PROHIBIDAS LAS MASCARILLAS CON VÁLVULA

Además, según la resolución, consultada por Europa Press, será obligatorio el uso "adecuado" de la mascarilla, es decir, que cubra desde parte del tabique nasal hasta la barbilla incluida.

Y el tipo a utilizar no debe estar provista de válvula exhalatoria, salvo en usos profesionales para los que esté recomendada.

La mascarilla también se exigirá en el transporte aéreo, marítimo, o en autobús y ferrocarril, así como en medios públicos y privados complementarios de viajeros, en vehículos de hasta nueve plazas, -incluido el conductor- si los ocupantes no conviven en el mismo domicilio.