- Miles de personas se manifestaron ayer en Beirut para exigir frente al Parlamento la dimisión de las autoridades tras la explosión registrada el martes en el puerto de la capital libanesa, que causó un total de 158 muertos hasta la fecha y más de 6.000 heridos. La manifestación finalizó con enfrentamientos entre las personas concentradas y la policía, donde un agente resultó fallecido.

Poco antes de los enfrentamientos, la gente comenzó a expresar su rechazo al Gobierno y al régimen político al que responsabilizan de la grave crisis y el deterioro en que ha caído el Líbano. "Hablamos y hablamos, pero nadie nos escucha", dijo una de los manifestantes, que acudió a la convocatoria llena de indignación por la explosión de 2.750 toneladas de nitrato ni amonio almacenados desde hace seis años en el puerto de Beirut.