El cribado especial, promovido por Salud en las instalaciones de Uvesa en Tudela, ha localizado 175 positivos, casi un 25% del total de la plantilla, unas cifras que convierten este brote en el mayor registrado en el entorno laboral de Navarra por el momento. A pesar de este resultado tan abultado, la compañía avícola, productora de pollo, mantiene por ahora la actividad, y se ha puesto a disposición del Gobierno de Navarra "para buscar las mejores soluciones", resaltó la empresa. En este contexto, representantes de la firma ribera y técnicos de Salud Pública se van a reunir hoy por la mañana en las instalaciones de Tudela, que ostenta el sello Área segura frente a la covid-19, otorgado por el Servicio de Prevención MAS Prevención. Sindicatos con representación en el comité, compuesto por ocho delegados de ELA, cinco de UGT y cuatro de CCOO, reaccionaron ayer ante los resultados de los PCR que se realizaron a la plantilla el martes pasado. Tanto CCOO como ELA coincidieron en exigir el cierre temporal, en notas separadas.

El departamento de Salud está estudiando con los directivos de Uvesa las medidas a adoptar en la compañía, y ayer ni confirmó ni descartó la posibilidad de clausurar la actividad de manera provisional. Al mismo tiempo, informó el Gobierno, que con los técnicos de Salud Pública y Laboral y los equipos de Atención Primaria se trabaja en una intervención integral y específica en cuanto a rastreo, seguimiento de contactos, aislamientos y test en este brote laboral con ramificaciones socio-familiares ya con una óptica geográfica y social más amplia.

aislados los 175 con covid

Los 175 trabajadores y trabajadoras que han dado positivo en la prueba del PCR ya se encuentran aislados, y la empresa añadió que "todos son asintomáticos". Los afectados se unen a los 22 casos que confirmó la empresa avícola durante el fin de semana, hasta elevar a 197 el personal infectado por el virus, casi el 28% de la plantilla, que actualmente asciende a 713 asalariados y asalariadas.

Salud propuso esta semana la elaboración de pruebas en esta empresa cárnica, después de que observara con preocupación estos 22 casos en el área de Tudela, castigada por el coronavirus en el verano. Ocho días antes, CCOO presentó una denuncia en Inspección de Trabajo en la que declaraba "la falta de medidas preventivas y el incumplimiento de las normas básicas de seguridad de distanciamiento y de uso de la mascarilla en las líneas de producción y en el comedor", como se observa en la foto que se adjunta en esta página del área de descanso de Uvesa, que facilitó este sindicato el 17 de agosto.

La prueba PCR era voluntaria, y de los 713 empleados -algunos integrantes de la plantilla se encontraban de vacaciones-, acudieron 640 el martes. De estos últimos, 175 han salido que tienen coronavirus. Los resultados, que se dieron a conocer ayer, "están pendientes de un análisis más detallado por parte del Instituto de Salud Pública", informó el departamento. Además, como una parte de las personas que han dado positivo reside en comunidades o provincias limítrofes, como Aragón, La Rioja o Soria, añade "un elemento más de complejidad a la gestión procedimental y práctica del brote", porque son las autoridades de esos territorios quienes deben encargarse del protocolo de actuación de cuidado y rastreo en esos casos.

Uvesa especificó en una nota que "las medidas adoptadas por la empresa han sido homogéneas en cada una de las instalaciones que posee", pero que el centro de Tudela "se ha convertido en el único que ha arrojado, tras esta campaña de detección de la covid-19, una prevalencia tan elevada".

propagación del virus

Sin embargo, la Federación de Industria de CCOO venía advirtiendo desde hace tiempo "del riesgo de propagación del virus en las instalaciones de Uvesa, como había ocurrido en Alemania y en otras comunidades". ELA resaltó que "por sus características de temperatura y trabajo en cadena, este matadero es ideal para propagar el coronavirus, como se ha demostrado en otros lugares del mundo". Este sindicato manifestó que "la dirección nunca ha tratado esta pandemia con seriedad y que ha ocultado información, a pesar de la petición de los delegados y de la solicitud de pruebas porque un matadero de aves no puede quedarse en los protocolos genéricos".

CCOO solicitó al Gobierno de Navarra que "dictamine el cierre cautelar de la empresa, ante el evidente riesgo de propagación del coronavirus entre el conjunto de la plantilla y de la población en general"; y ELA remarcó que si Uvesa no cierra de manera temporal que sea "la autoridad sanitaria dependiente del Gobierno de Navarra quien adopte la decisión de paralizar la planta hasta garantizar la seguridad de todo el personal y de sus familias". Además, pidió que los costes de ese cese recaigan en Uvesa y no en los empleados.

La empresa insistió en un comunicado que desde el inicio de la pandemia, ha tomado "todas las medidas de prevención", y que ha seguido "los protocolos de seguridad, como acreditan las inspecciones y visitas de las autoridades correspondientes". Uvesa informó de que desde el estado de alarma en marzo, la inspección ha acudido dos veces a Tudela, la última vez el 5 de agosto, y que comprobó "el cumplimiento de la empresa de todas las prescripciones legales". Además, reiteró que "la materia prima tratada en la planta puede consumirse porque cumple con todas las normas de calidad y seguridad".

CCOO añadió que Uvesa usó en el pasado la figura del falso autónomo, y que tras una denuncia, tuvo que asumir como asalariados a 600 personas; y rememoró los conflictos laborales que está sufriendo la plantilla para que cumpla con el convenio.