- “El arte de gestionar, de manera sostenible, nuestro mundo emocional de forma que nuestra energía afectiva nos sirva para mejorar como personas, para aumentar la calidad de nuestras relaciones y para mejorar el mundo en que vivimos”. Así definen los precursores de la ecología emocional esta metodología en la que se va a inspirar a partir de este curso el programa Laguntza del departamento de Educación. Este plan, que se puso en marcha en Navarra en 2016-17, nació con le objetivo de formar al profesorado en materia de convivencia y prevención del acoso escolar. “Nos hemos dado cuenta de que el programa en algunos centros no ha cuajado como se esperaba y por ello hemos decidido darle un nuevo enfoque basado en la ecología emocional”, explicó ayer Mª José Cortes, responsable del servicio de Inclusión, Igualdad y Convivencia del departamento de Educación. En esta nueva andadura de Laguntza se han implicado doce centros educativos de Infantil y Primaria y la formación, que comenzó ayer en Civican, llegará este curso a más de 500 docentes.

Este giro en el programa Laguntza, según remarcó Cortés, “no supone romper con lo anterior” sino que se trata de implementar una filosofía distinta para mejorar la convivencia escolar. De hecho, la previsión del departamento de Educación es mantener buena parte de los módulos de formación relacionados con esta materia, ya que en estos cuatro cursos alrededor de 300 docentes de 40 centros han recibido formación del programa Laguntza. “Hay centros muy potentes que van a seguir con su filosofía porque les está funcionando y no tienen problemas de convivencia. Pero en otros casos vimos que necesitaban otro impulso, de ahí el cambio de enfoque”, insistió la responsable del departamento.

Aunque la convocatoria publicada por Educación permitía la incorporación de una veintena de centros, finalmente son doce los que iniciarán el pilotaje del nuevo programa Laguntza. Se trata de los colegios públicos de Aoiz, Lekunberri, Etxari Aranatz, Lerín, Cortes, Olite y Falces; Buztintxuri, Amaiur y San Francisco (los tres de Pamplona), y Mendialdea II, de Berriozar. Todos los centros imparten enseñanzas de Infantil y Primaria salvo Olite y Falces que también ofertan el primer ciclo de ESO (1º y 2º curso).

El programa consiste en dos sesiones de formación presencial (la primera tuvo lugar ayer en Civican y la segunda se celebrará el próximo jueves) y el resto se impartirá de forma online. “Esta formación la recibe lo que se llama el grupo motor, es decir, un máximo de cuatro docentes de cada uno de los 12 centros educativos. Estos profesores pertenecen al equipo directivo y a la comisión de convivencia del colegio”, explicó Cortés. Este grupo impulsor será el encargado de formar después al resto del profesorado de cada centro, al alumnado y a sus familias. La previsión es que a lo largo de este curso más de 500 docentes reciban formación en ecología emocional. “Se trata de dar herramientas al alumnado para que gestionen su mundo emocional, sean capaces de comunicarlo a los demás y puedan establecer vínculos desde el respeto y la escucha activa, con el objetivo último de modificar el entorno hacia un mundo más sostenible”, expuso Cortes.

En otras palabras, el objetivo es que los chicos y chicas desarrollen emociones positivas para tener seguridad a nivel emocional y favorecer así las relaciones con los demás. “Es transversal a todas las asignaturas. Se trata de buscar huecos en la vorágine del currículo para trabajar estos aspectos. Se ha creado un maletín con 60 dinámicas en Infantil y 45 en Primaria con el objetivo de que se pueden aplicar en el aula”, señaló la responsable del departamento, quien considera que “la escuela necesita un cambio hacia una formación en valores a nivel personal. Si conseguimos que la comunidad se sienta parte de este proyecto merecerá la pena. Todos tenemos rabia, frustración o ansiedad pero tenemos que aprender a encauzarlas”.

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Centros piloto. Los colegios de Infantil y Primaria de Aoiz, Lekunberri, Etxarri Aranatz, Lerín Cortes, Olite y Falces; Buztintxuri, San Francisco y Amaiur (Pamplona), Joakina Lizarraga (Sarriguren) y Mendialdea II (Berriozar).

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Docentes del grupo motor. La formación principal la reciben cuatro docentes de cada uno de los docen centros educativos, pero durante el curso la previsión es que más de 500 profesores (todos los de estos colegios) reciban formación en ecología emocional.