El Gobierno de Navarra y el Estado elaborarán un convenio de colaboración en torno a la memoria democrática y al reconocimiento y reparación de las víctimas de la represión franquista.

Así lo ha comunicado el Ejecutivo Foral tras la reunión telemática que ha mantenido la consejera de Relaciones Ciudadanas, Ana Ollo, con el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, siguiendo con los contactos iniciados en julio y en el marco del proceso de presentación del Anteproyecto de Ley de Memoria Democrática en el que está trabajando el Gobierno de España.

El secretario de Estado se ha centrado en las cuatro áreas que consideran prioritarias en Memoria Democrática: el desarrollo de un mapa de fosas para todo el territorio español; un plan cuatrienal de exhumaciones y la creación de un banco de ADN a nivel estatal; la elaboración de un censo de vestigios franquistas; y el reconocimiento de una práctica represiva como la de los trabajos forzados.

Por su parte, la consejera ha mostrado su disposición a colaborar y compartir información acerca de todos estos puntos que, como ha señalado, se llevan ya trabajando en Navarra desde hace 5 años.

Además, según la citada fuente, ha recordado la última actualización del mapa de fosas que, desde hace unas semanas, incorpora un enlace con el Fondo Documental de la Memoria Histórica de la Universidad Pública de Navarra.

Ollo ha insistido en que el Gobierno Foral tiene intención de continuar con su propio plan de exhumaciones, mediante su convenio con la Sociedad de Ciencias Aranzadi en las labores de búsqueda de desaparecidos.

Además, según apuntan, ha concedido una gran importancia a la creación del banco de ADN estatal, porque, entre otras cuestiones, permitiría avanzar en la localización de familiares asesinados en el marco de la fuga de Ezkaba de 1938.

Sobre simbología franquista, se ha explicado el proceso desarrollado en Navarra, junto a las entidades locales, así como los aspectos que todavía quedan por resolver, en especial distinciones y reconocimientos que personas vinculadas al franquismo recibieron en localidades pequeñas.

El Pirineo navarro sabe de trabajos forzados y de esclavos del franquismo, ha añadido Ollo quien ha citado que una muestra es el barracón que se reconstruyó en Igal y otra los búnkeres donde han trabajado grupos de jóvenes estos años en el marco de los campos de voluntariado juvenil.

Desde Navarra se ha insistido en la necesidad de ampliar y fortalecer el acceso a los archivos estatales para impulsar proyectos de investigación que desarrollen el derecho a la verdad que las víctimas del franquismo merecen.

Se ha explicado al secretario de Estado el programa Escuelas con Memoria, que ofrece a las víctimas la oportunidad de transmitir a las nuevas generaciones la memoria de lo ocurrido a partir del golpe de estado de 1936.

También se le ha informado de la inminente creación de una Red de Escuelas con Memoria, por la Paz y la Convivencia, en colaboración con el departamento de Educación.

Estas Escuelas, según se ha explicado, desarrollarán parte de sus actividades en los lugares de la Memoria Histórica de Navarra, y pretenden proyectarse al resto del Estado español, así como insertarse en proyectos europeos de memoria.

Además de la consejera de Relaciones Ciudadanas, han asistido al encuentro el director general de Paz, Convivencia y Derechos Humanos, Martín Zabalza, y el director del Instituto Navarro de la Memoria, Josemi Gastón.

Por parte del Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, han estado presentes, además del propio secretario de Estado, su jefe de gabinete, Alfonso Berlanga, el director general de Memoria Democrática, Diego Blázquez, así como los asesores Francisco Ferrándiz y Francisco Etxeberría.