- La Policía Nacional ha reconocido su responsabilidad en las graves lesiones provocadas a una menor de 14 años de edad que fue atropellada por un furgón policial en el transcurso de una kalejira en Pamplona durante los carnavales de este año.

El cuerpo policial ha indemnizado a la víctima por la doble fractura de cadera que le provocó el vehículo policial, que le golpeó con la rueda trasera y la empotró contra una pared de la calle Mayor de Pamplona la noche del día 21 de febrero de 2020. Le causaron lesiones que la mantuvieron durante 118 días en periodo de incapacidad (hasta el 17 de junio), siete de ellos de ingreso hospitalario, 30 de encamamiento o o con dos muletas y otros 81 días de perjuicio por pérdida temporal de calidad de vida moderada, según el informe forense, cuya valoración ha resultado decisiva para que la Abogacía del Estado active el resarcimiento. La familia de la menor, defendida por el abogado pamplonés Javier Purroy y que había presentado denuncia en el Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona, se ha mostrado satisfecha con el reconocimiento de la versión de lo sucedido y la asunción de responsabilidades.

Conviene recordar que en el incipiente proceso judicial que ahora se da por finalizado, los policías actuantes en el lugar no habían reconocido ni en sus declaraciones en el atestado, ni la que efectuó el conductor en el juzgado, su culpabilidad en dicho siniestro. Sin embargo, la confección del informe forense no ha dejado lugar a dudas y tal y como relató la lesionada en un primer momento sus fracturas fueron causadas por "un aprisionamiento contra la pared provocado por el vehículo de la Policía". El forense concluye que "las lesiones descritas por los partes asistenciales son compatibles con el mecanismo relatado, un atropello a baja velocidad con compresión de la zona pélvica entre la rueda del vehículo y la pared de la calle".

La menor, que iba disfrazada y participaba en la fiesta del carnaval que se desarrollaba en la Plaza de San Francisco, fue perseguida por el furgón policial por la calle San Francisco, cerrándole el paso paulatinamente y estando en la acera de la cale, a la altura de los número 26-28, junto al bar Txintxarri, el furgón le atropelló con la rueda trasera y la encajonó contra la pared. Una vez que ocurrió el atropello, los agentes, pese a los evidentes gestos de dolor de la menor, la introdujeron en el furgón y la trasladaron a la comisaría de la calle General Chinchilla de la capital navarra, formulaba la madre de la lesionada en la denuncia. Ante las persistentes reclamaciones de la chica por el dolor que sufría debido a que se había fracturado las dos caderas, los agentes actuantes llamaron al 112 de SOS Navarra, solicitaron una ambulancia y esta la trasladó a Urgencias del Hospital de Navarra donde fue atendida por el servicio de pediatría. Allí, a través de las pruebas diagnósticas, se comprobó la gravedad de las lesiones que presentaba.