La consejera de Salud del Gobierno de Navarra, Santos Induráin, ha insistido este jueves en pedir "máxima cautela y prudencia" de cara a las Navidades y ha abogado por "aplicar pasos graduales y parciales que consoliden los logros en materia de descenso de contagios y de impacto asistencial". A su juicio, es preciso "buscar el equilibrio entre ser conservadores y restrictivos con cierta flexibilización, en la que estamos trabajando con diferentes sectores".
De ahí que haya informado de que se mantiene en Navarra el cierre perimetral y que se abrirán dos ventanas temporales para desplazamientos de personas que vayan a reunirse con familiares y allegados, "restringiéndolo entre el 23 y el 26 de diciembre y entre el 30 diciembre y el 2 de enero". El toque de queda será las noches de Nochebuena y Nochevieja a la 1.30 horas y las reuniones, de dos unidades convivenciales con un máximo de 10 personas, "recomendando que se reúnan los menos posibles". Comunidades límitrofes de Navarra, como Euskadi y Aragón, mantendrán las mismas fechas para permitir traslados.
Induráin ha respondido en el pleno del Parlamento a una pregunta oral del PSN sobre las medidas a adoptar en las próximas Navidades en relación con el Covid-19 y ha asegurado que éstas serán unas Navidades "diferentes", en las que ha pedido que "nos juntemos lo menos posible y los menos posibles". "No es obligatorio apurar los márgenes permitidos al máximo", ha dicho.
La consejera ha explicado que es su intención actualizar la normativa vigente para "fijar un escenario de cara a final de año y el arranque de enero" y ha recordado que "la Navidad está incluida en este marco temporal más amplio".
Induráin ha señalado que "es importante lograr la implicación de la ciudadanía" y que "en ello se está trabajando". "Nuestro planteamiento es abordar el periodo navideño dentro de una lógica que viene de atrás y va a proyectarse más allá de las fechas festivas", ha comentado.
La parlamentaria socialista Patricia Fanlo ha indicado que "es momento de prudencia" y ha señalado que "estamos saliendo de la segunda ola de la pandemia gracias a unas medidas restrictivas y una mayor concienciación social". "No nos podemos permitir una tercera ola después de las Navidades", ha dicho.
Según ha comentado, "Navarra va a tener unas Navidades diferentes, evitando que las personas más vulnerables se queden solas pero con unas medidas restrictivas y de seguridad para evitar el contagio". "No podemos bajar la guardia", ha dicho, para decir que "hay que cumplir las medidas del Gobierno foral". "Pedimos que se limite al máximo la movilidad y contacto con diferentes personas", ha comentado.
