as comunidades decidieron mantener las medidas para evitar la propagación del coronavirus una semana más, la ultima antes de que finalice la vigencia del estado de alarma, el 9 de mayo, y las restricciones como el cierre perimetral, la limitación de aforos o el toque de queda necesiten de autorización judicial.

Catalunya y Madrid fueron las dos últimas comunidades en anunciar, ayer, sus restricciones: Madrid con el confinamiento de otras cinco zonas de la capital, además de San Sebastián de los Reyes, Getafe y Las Rozas; y Catalunya para prorrogar las medidas vigentes una semana más a la espera de que llegue la gran flexibilización el lunes 10 de mayo, con la apertura de la restauración en horario de cena.

Los gobiernos autonómicos buscarán instrumentos legales que permitan mantener algunas de estas restricciones si la evolución de la pandemia lo exige, incluso solicitar al Gobierno que decrete el estado de alarma en sus territorios, una vez que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no contempla la prórroga del actual decreto.

Las comunidades mantienen pues las restricciones, de forma que todas, salvo tres, están cerradas perimetralmente; cinco de ellas tienen municipios confinados, y la mayoría limita la movilidad nocturna entre las 23 y las 6 horas.

Todas las comunidades autónomas -salvo Madrid, Canarias y Baleares- están cerradas perimetralmente, también las ciudades de Ceuta y Melilla, y así seguirán hasta el 9 de mayo.

Si bien Madrid no está cerrada, sí mantiene la estrategia de restringir la movilidad en las zonas básicas de salud con más incidencia de covid.

En el caso de Canarias y Baleares se pueda viajar a las islas presentando una prueba diagnóstica negativa (PCR o test de antígenos).

En el archipiélago canario, lo que sí está cerrado perimetralmente es Tenerife, por lo que no se puede salir o entrar en la isla salvo causas justificadas. Sin embargo, esta semana se añadió la novedad de poder entrar si se aporta una prueba diagnóstica.

Por contra, Baleares no tiene ni cierre perimetral ni restricciones de movilidad interior.

En general, las comunidades empezaron a cerrarse a partir de octubre con aperturas puntuales en Navidad en algunos casos. La Rioja fue de las primeras y confinó fronteras el 23 de octubre, seguida de Murcia y Asturias (el día 26); Castilla y León, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana, el 30.

Además del cierre de la comunidad, algunas mantienen confinamientos de municipios. Es el caso de Andalucía, que tiene 94 municipios cerrados, al menos una semana, aunque ha abierto la movilidad entre las ocho provincias, cerradas desde enero.

Extremadura tiene diez municipios cerrados; Navarra, seis; La Rioja, cinco, que suman más de 61.000 habitantes; Aragón, la comarca de las Cinco Villas y Tarazona (Zaragoza) y Jaca y Fraga, en Huesca; en Asturias, el municipio de Llanes.

Asimismo, en el País Vasco hay cierres perimetrales en 79 municipios, incluidas las tres capitales.

Y en Catalunya, desde el pasado 26 de abril, el Govern permite la libre movilidad en todo el territorio, sin límites de burbujas convivenciales.

Castilla-La Mancha y Murcia son las comunidades con toques de queda menos severos, ya que se inician a las 00:01 horas hasta las seis de la madrugada, horario que también rige en las islas canarias de Fuerteventura, La Gomera y La Palma.

Mientras, la Comunidad Valenciana, Castilla y León, Cataluña, el País Vasco y Baleares son las más restrictivas y prohíben la movilidad nocturna entre las 22:00 horas y las 6:00.

En la mayoría de las comunidades el toque de queda va de las 23:00 a las 6:00 horas: es el caso de la Comunidad de Madrid, Galicia, Extremadura, Navarra, Cantabria, Aragón, Andalucía, Asturias y las islas canarias de Tenerife, Gran Canaria, Lanzarote, La Graciosa y El Hierro.

La Rioja empieza el toque de queda a las once de la noche pero lo acaba una hora antes, a las cinco de la madrugada, y la ciudad de Ceuta lo tiene establecido de 22:00 horas a 5:00, igual que Melilla, en función del primer rezo del día en las mezquitas.

Las medidas respecto a los aforos son más restrictivas en aquellos municipios o localidades confinados por una mayor incidencia de covid, en todas las comunidades, con cierres absolutos de la hostelería o adelantados al resto del territorio autonómico.

En el País Vasco, los establecimientos de hostelería deben cerrar a las 20 horas, y su aforo en el interior es del 50 por ciento. Las reuniones están limitadas a cuatro personas.

Además, en localidades donde la incidencia acumulada a 14 días es superior a los 400 casos, el horario del interior de bares y restaurantes es aún más restringido.

Navarra y Cantabria mantienen cerrado el interior de la hostelería. En Castilla y León, los aforos en espacios públicos y privados tienen un límite de cuatro personas salvo convivientes.

En Galicia, Madrid, Aragón, Extremadura y Asturias también rigen las reuniones de cuatro personas en espacios cerrados y seis al aire libre y no hay servicio de barra.

En Madrid y Castilla-La Mancha, los aforos interiores están limitados al 50%. Todos los establecimientos de hostelería cierran a las 23 horas y no admiten clientes desde una hora antes.

Extremadura es de las comunidades con aforos más restrictivos en comercio y hostelería: el 30% en centros comerciales y el 40% en establecimientos minoristas. Y no se permite la permanencia en zonas comunes.

Al igual que en Extremadura, en Catalunya, el aforo en comercio es también del 30 % igual que en el interior de bares y restaurantes.

Algunas comunidades mantienen confinamientos de municipios como es el caso de Andalucía, con 94 cerrados.