El vaivén en las decisiones durante cuatro meses y la posibilidad de elegir vacunas ha hecho rechazar la segunda dosis de Pfizer o AstraZeneca a 38 profesionales esenciales navarros de los 7.500 citados esta semana para completar la pauta.

Se trata de en torno a un 0,5% de los contactados, una cifra irrisoria que puso en valor ayer la consejera de Salud, Santos Induráin. “Al margen de la vacuna elegida, esto habla mucho de su compromiso y responsabilidad”, agradeció.

Tras esta primera tanda, el SNS-O comenzó a contactar el miércoles con el siguiente grupo de profesionales esenciales que llegan a la 16ª semana después de la primera dosis, de cifra similar a la de éste primero y que se vacunarán a partir del lunes. Según las primeras citas cogidas, el departamento aprecia una tendencia similar a la del primero, en el que hubo un 86% de personas que quisieron repetir dosis y un 14% que prefirieron completar su inmunización con Pfizer.

El 21 de junio es el día en el que se está previsto cerrar la vacunación de estos 21.000 profesionales esenciales navarros pendientes de una segunda dosis que llegará para todos porque los suministros existentes “desde luego, son suficientes”, según la consejera, que se basó en los últimos envíos recibidos -más de 50.000 dosis en una semana-.

Sobre la petición del consentimiento informado para recibir la segunda dosis de AstraZeneca, Induráin aseguró que es “una fórmula muy habitual en el ámbito sanitario”.

“La población lo ha entendido así y está ejerciendo su derecho. El objetivo prioritario es garantizar la mayor cobertura a estos grupos profesionales y seguir con la vacunación poblacional”, expuso, aunque reconoció que “hay cosas que quizás se hubieran debido haber explicado de una manera más adecuada”.

En cualquier caso, emplazó a “pensar en el futuro y ser resolutivos en el presente” e incidió en que lo “importante” es cerrar la inmunización con una segunda dosis. En este sentido, reiteró que desde “el Departamento de Salud y el Gobierno vamos a seguir vacunando con Pfizer, Moderna, AstraZeneca o Janssen, con todas las vacunas que se vayan autorizando porque lo importante no es la marca, sino la tendencia que llevamos”, enfatizó.

Por su parte, la parlamentaria de Navarra Suma, Cristina Ibarrola, calificó de “suspenso absoluto” la gestión del Gobierno con este grupo, a los que cree que “han trasladado la responsabilidad y ya el colmo de los colmos, firmar un consentimiento”.