De haber sabido la que se le venía encima cuando aceptó el cargo de consejera de Salud, Santos Induráin Orduna (Uztárroz, 1959) lo hubiese aceptado igual. "Estaría aquí", responde rotunda, pese al desgaste evidente de más de año y medio de pandemia y a que, según asegura, no duerme más de cinco horas y media al día. Lo hubiese aceptado de igual manera por los mismos valores que le llevaron a ser médico de familia: "Poner en el centro a las personas". En ese sentido, se muestra especialmente dolida por la situación de la Atención Primaria, que considera el eje vertebrador de la sanidad y a la que ahora su departamento pretende dar un impulso, empezando por aumentar la presencialidad. Un reto que Induráin ya planteaba al inicio de la legislatura y que la pandemia ha hecho "más necesario que nunca" si se aspira a "una sanidad pública fuerte y cohesionada".

La consejera habla de los retos que tiene por delante su departamento durante esta segunda mitad de legislatura, una vez se ha pasado página con el coronavirus, aunque recuerda que todavía el virus "permanece entre nosotros".

Entrevista a Santos Induráin, consejera de Salud

Entrevista a Santos Induráin, consejera de Salud

Consejera, ¿está acabada la pandemia en Navarra?

-No, la pandemia no ha finalizado aún, porque la pandemia, como su nombre indica, es mundial. Dicho esto, estamos en una situación muy óptima en la evolución de los contagios, pero el virus permanece entre nosotros y por eso tenemos que seguir siendo prudentes y cautelosos.

El 90% de la población navarra está vacunada. ¿Qué le diría a ese 10% que ha decidido no hacerlo?

-Lo primero, que nuestro consejo, desde la evidencia científica y desde situaciones que podemos argumentar, es que se vacunen. La vacuna está salvando vidas y está evitando ingresos. Nos parece muy importante transmitir esto: que las personas que no estén vacunadas tengan los argumentos de los que nosotros disponemos y, por otro lado, que tengan toda la accesibilidad a las vacunas.

La viróloga Margarita del Val señaló recientemente que "en dos semanas, en dos meses o en dos años todos nos infectaremos de covid" a pesar de la vacunación. ¿Comparte esa opinión? ¿Cree que es eso lo que va a ocurrir en Navarra?

-Ahora mismo, lo que esta clarísimo es que la herramienta que nos está haciendo avanzar es la vacuna. Nos ha permitido recuperar la vida económica, social y emocional en un momento en el que todos teníamos una fatiga pandémica importante. ¿Cómo va a evolucionar en un futuro? Bueno, ahora estamos poniendo la dosis adicional a personas mayores y vulnerables, por reforzar su inmunidad. Pero también hay un punto que es el de la vacunación global: si en otros países la vacuna no avanza y hay infecciones, la probabilidad de mutaciones del virus es mayor y no sabemos, según cómo evolucione, si nos podrá afectar.

El reto a nivel mundial esta ahí, ¿no? En apoyar a los países que van menos avanzados en la vacunación...

-Está el objetivo, desde la reunión de Roma, de llegar al 40% de vacunación a nivel mundial en 2021. Es muy importante este reto. Nosotros estamos en esto y somos favorables a donaciones y a apoyar a otros países.

¿Descarta una sexta ola que pueda comprometer al sistema sanitario?

-Yo distinguiría dos cuestiones: ¿descarto más olas? No. Puede haber más olas, pero probablemente serán olas menores sin el compromiso para el sistema sanitario que hemos conocido, porque la evolución de la incidencia está oscilando en picos, pero la situación del sistema sanitario es totalmente distinta.

Pero un leve impacto por la covid-19, si se suma a la temporada de gripe, que parece que va a venir fuerte, ¿puede complicar la situación a nivel asistencial?

-Habrá que ver qué pasa con la gripe, que todos los años conllevaba a nivel del sistema sanitario un plan de acción y de contingencia. Este año, los mayores de 70 años, la población más vulnerable, este lunes se empezaron a vacunar con la tercera dosis contra la covid-19, pero también con la vacuna antigripal. El año pasado aumentamos mucho las tasas de vacunación porque la población se sensibilizó. Ahora tenemos casi un 100% de vacunados en mayores de 70; por lo tanto, probablemente en esta campaña de vacunación antigripal se van a vacunar más personas que el año pasado, que ya fueron muchas.

¿De qué otra manera se está preparando Salud para esta temporada de gripe?

-Con la gripe, en el sistema sanitario nos preparamos con todos los recursos que tenemos: la red de vigilancia, los protocolos de profesionales, la red asistencial... todos nos preparamos. Pero habrá que ver qué viene, porque el año pasado no hubo gripe, seguramente por varias cuestiones: por la circulación intensa del coronavirus y por el uso de medidas preventivas e individuales, que han demostrado el efecto que tienen en frenar la transmisión del virus y hay que tenerlas muy presentes. Es impredecible cómo va a evolucionar la gripe. En el hemisferio sur parece que no ha sido muy fuerte, pero lo que sí hemos visto es que si se pasan las dos enfermedades a la vez, gripe y covid-19, la gravedad aumenta en el proceso.

"La pandemia no ha finalizado, pero estamos en una situación muy óptima en la evolución de contagios". Santos Induráin

Echando la vista atrás, ¿que valoración hace de la gestión de la pandemia, desde el desconocimiento del inicio hasta el día de hoy?

-Hemos tenido cinco olas y, efectivamente, no tiene nada que ver la primera ola con las últimas. En la primera, el sistema sanitario, nosotros, los científicos, los profesionales, la sociedad... no sabíamos nada del comportamiento que tenía el virus. Fuimos aprendiendo. Después, en las sucesivas olas diseñamos un sistema de detección, protocolos, contención de los brotes, etc. hemos aprendido como profesionales sanitarios y como sociedad. Porque esto no hubiera salido adelante sin la implicación de la sociedad, que ha respondido, siguiendo las medidas, que he de decir que algunas de ellas me resultaron muy duras, pero que sabíamos que era necesario tomarlas.

¿A qué medidas se refiere?

-A las que afectaban a derechos fundamentales en el ámbito privado, al cierre de la hostelería... porque éramos conscientes del impacto que tenían en el sector. Pero estaban muy argumentadas y valoradas y que, en la respuesta que dimos como Gobierno, también conllevaron ayudas.

¿Cuál ha sido el peor momento que recuerda de la pandemia?

-Lo que siempre recordaré son los fallecidos, sus familiares, el dolor, el duelo... Eso ha sido lo que más me ha impactado. Por otro lado, fue muy llamativo cuando se llamó por primera vez a la gente mayor para vacunarse. Muchos se emocionaban al otro lado del teléfono y a mí contar esto también me emociona porque entonces significaba que ya pasábamos a otra fase.

¿Qué lecciones ha aprendido de la pandemia?

-En la pandemia han abordado debilidades de nuestro sistema que ya sabíamos y también muchas fortalezas. ¿Lecciones aprendidas? La necesidad de un sistema sanitario solvente y potente, y la necesidad de reforzarlo y actualizarlo. El apostar y el fortalecer la Atención Primaria, que es el eje vertebrador del sistema sanitario, así como la Salud Pública o la Salud Mental. Esto eran retos estratégicos que planteaba al inicio de la legislatura y que la pandemia ha hecho más necesarios que nunca. Luego, lecciones en el buen sentido: el trabajo en equipo dentro de todos los ámbitos. He visto trabajar en equipo como nunca y teniendo el objetivo. También ha sido fundamental el trabajo interdepartamental dentro del Gobierno, el trabajo con entidades sociales, autoridad locales, etc.

Haciendo un poco de autocrítica, ¿qué errores se han cometido en la gestión del departamento?

-Yo creo que la evaluación es lo que nos pondrá encima de la mesa los errores para no volver a cometerlos. ¿Hay cuestiones que hemos ido cambiando conforme íbamos aprendiendo? Sí, pero hemos funcionado con las evidencias que teníamos. Seguro que ha habido, pero una evaluación que se va a realizar nos lo situará.

Pero entendemos que es consciente de que errores o equivocaciones se habrán cometido...

-Yo creo que en toda la acción sanitaria hay que tener un sentido autocrítico. Si no, no se avanza.

Si hubiera sabido que se iba a tener que enfrentar a una pandemia, ¿hubiera aceptado el cargo de consejera?

-(Risas) ¿Saben por qué me río? Porque me encuentro con muchos compañeros que me dicen esto y yo les respondo con toda rotundidad: "Estaría aquí". Toda mi vida profesional he estado trabajando por la sanidad pública y por aquellos valores que me hicieron ser médico de familia. Entonces, aún sabiendo lo que venía, no iba a dar un paso atrás cuando siempre he pensado que hay que dar una respuesta, que hay que poner en el centro a las personas... Esa es la actitud que hay en este Gobierno. O sea que sí, estaría aquí de haberlo sabido.

¿Cuándo podrán estar los niños navarros sin mascarilla en el recreo?

-La prudencia ha sido nuestra compañera, y es una buena compañera. Ahora nos están viniendo otros virus y sabemos que los niños tienen menos riesgo de cursar una enfermedad grave pero también sabemos el riesgo de transmisión que tienen. También la vacunación de 5 a 11 años está pendiente de autorización por parte de la EMA, pero es algo que ocurrirá seguramente a finales de este año. Entonces, en esta situación, apelaría a la prudencia y a la cautela.

La pandemia ha puesto de relieve la importancia del Instituto de Salud Pública y, de hecho, señaló en el Parlamento que deben reforzarla en su vertiente de vigilancia epidemiológica y de promoción de la salud. ¿Cómo lo van a hacer?

-En Salud Pública yo diría que hay ámbitos de trabajo distintos. Efectivamente, la vigilancia epidemiológica ha sido clave en la pandemia y se va a reforzar. Pero también hay aspectos muy importantes como la promoción y prevención de la salud, el observatorio de la salud comunitaria, también de cambio climático, de Enfermedades de Transmisión Sexual... Tiene unos ámbitos de vigilancia epidemiológica que son fundamentales y en las vertientes de prevención y en las vertientes de detección precoz va a haber un impulso.

¿Qué va a pasar con el contingente covid? ¿Van a pasar a reforzar otras áreas?

-Estamos en un momento en el que este tema lo estamos reajustando según las necesidades. Pero es muy importante para nosotros el mantenimiento desde el punto de vista sanitario de la detección, del aislamiento, del control de brotes... lo comento porque es así, por poner en valor a todos los sanitarios implicados. De los profesionales que están actualmente en el contingente covid la idea es que un 70% de los que están continúen a nivel de detección, rastreo, vacunación... lo que vamos a mantener es un equipo multidisciplinar que va a vascular entre un lado y otro según las necesidades que haya de detección o vacunación.

¿Cuántos profesionales formarían este equipo?

-Sobre un centenar. En el conjunto rondaría los 100 profesionales.

EN CORTO

¿Qué nota le pone a la gestión de la pandemia de Salud?

-La nota tiene que ser externa, nos la tienen que poner. Además creo que en esto hay bastante consenso en que se ha gestionado de manera razonable.

¿Qué opinión cree que tiene la sociedad navarra de su gestión?

-La sociedad se pronunciará cuando le toque, donde le toque, pero me llama la atención la de personas que por la calle me paran, me animan y nos animan y, sobre todo, hacen un reconocimiento al sistema sanitario y a sus profesionales. Creo que eso es un reflejo, independientemente de que haya evaluaciones más técnicas o políticas que vendrán luego y que haya lecciones aprendidas y lecciones por aprender, para esta y para sucesivas pandemias, que vendrán.

A su juicio, cuáles han sido las herramientas que han permitido dar la vuelta a la situación.

-Aparte de la vacunación, que es incuestionable, contar como contamos con un sistema sanitario sólido, potente y que ha sabido buscar alianzas dentro de todo el ecosistema sanitario y también con la sociedad. Eso es lo que me parece como la herramienta más importante. También por supuesto el trabajo en equipo, que se ha evidenciado en todos los ámbitos, el trabajo en equipo interno, de profesionales, del departamento y también de dentro del Gobierno. Y también diría la flexibilidad y la capacidad de aprendizaje.

Tiene un minuto para hablar con la consejera que el 29 de febrero de 2020 convocó a los medios porque habían detectado el primer caso de covid-19 en Navarra. ¿Qué le diría?

-Lo de siempre: lo primero las personas, personas que cuidan de personas.

¿Cuál ha sido la restricción que más le ha condicionado?

-La de las unidades convivenciales, que me ha impedido estar con mi familia, cuando estoy acostumbrada a una relación familiar intensa, y con amigos. Y otra no estar cerca cuando ha habido muertes de personas cercanas.

¿Ha pasado la covid-19? Si es así, ¿cómo lo pasó?

-Un estudio serológico detectó que tenía anticuerpos positivos, lo que indicaba que había pasado la covid de manera asintomática.

Cuál es el lugar que le ha servido de refugio durante estos meses.

-Cuando he podido ir, mi pueblo. Uztárroz y sus montes.

Qué le quita el sueño.

-Durante la pandemia el sueño se me ha reducido. Lo que más he dormido han sido cinco horas y media, porque mi cabeza está todo el tiempo con temas del sistema sanitario.

¿Del 1 (izquierda) al 10 (derecha), dónde se sitúa?

-En el 3.