PAMPLONA. Un hombre de nacionalidad española, con antecedentes penales y una orden de ingreso en prisión pendiente, fue arrestado este sábado por la Policía Foral al filo de las 17.15 horas en un domicilio de la calle Miravalles de Beriáin donde una mujer alertó que estaba siendo retenida en contra de su voluntad y que no podía salir de casa. Al parecer, entre ambos podía haber existido una relación y podía estar en vigor una orden de alejamiento, dato que por el momento no ha podido ser confirmado.

La intervención policial, que congregó a un dispositivo con un amplio número de agentes de la Brigada Central de Intervención de la Policía Foral, se produjo después de que la mujer telefoneara al 112 de SOS Navarra y alertara de que el hombre la estaba reteniendo. y agrediendo. En el momento de telefonear también facilitó la identidad del varón, del que se comprobó que tenía una requisitoria judicial pendiente de un juzgado de lo penal de Pamplona. Al llegar los agentes del lugar, el teléfono de la alertante estaba inoperativo, y lo mismo ocurrió con el móvil del denunciado, que también estaba inactivo.

Ante la situación de riesgo que se había manifestado, los efectivos policiales irrumpieron a la fuerza en el domicilio, donde solo se encontraba el hombre, que fue detenido por la requisitoria. Poco después, se pudieron poner en contacto con la mujer, que había podido salir de la casa, presentaba lesiones y que se encuentra ahora declarando ante la Policía Foral. La operación concitó la curiosidad desde los balcones y ventanas de decenas de vecinos ante el despliegue de fuerza policial en el lugar.