La Guardia Civil de Navarra ha advertido a la ciudadanía acerca de los secuestros virtuales, una modalidad delictiva sobre la que no se han registrado casos en la Comunidad foral en los últimos meses, aunque sí que se han producido en años anteriores. Por ello, la Guardia Civil pide a la ciudadanía precaución.

El secuestro virtual es un fraude o extorsión cometido mediante una llamada o comunicación que el delincuente efectúa a una víctima. Es un fenómeno delictivo que apareció en la primera década del siglo XXI como consecuencia de la proliferación de la telefonía móvil.

Si bien adquiere diferentes modalidades, la más común consiste en que, a través de una llamada de teléfono, el autor, haciéndose pasar por miembro de una organización criminal, hace creer falsamente a la víctima que acaban de secuestrar a una persona de su entorno cercano (normalmente un familiar) exigiendo, bajo amenaza de causar al 'secuestrado' daños físicos y a cambio de su pronta liberación, una cierta suma de dinero (que por lo general no será superior a los 10.000 euros), que la víctima facilita de manera rápida.

La Guardia Civil ha realizado una serie de recomendaciones para evitar estas situaciones, entre ellas, tener mucha precaución con llamadas entrantes con prefijos desconocidos o numeración oculta y, una vez atendida una llamada extorsiva, mantener en todo momento calma y serenidad.

También recomienda escuchar y dejar hablar al interlocutor, grabando la conversación si es posible; no facilitar nunca durante la llamada datos personales, familiares, de ubicación o de contacto; dejar siempre una línea de telefonía libre para intentar localizar a la supuesta víctima y/o avisar a la Guardia Civil simultáneamente; e intentar realizar alguna pregunta muy personal de la víctima que le permita, en base a la contestación, concluir que es un falso secuestro.

Igualmente, la Guardia Civil aconseja a los ciudadanos no efectuar nunca por su cuenta pagos monetarios o entregas de efectos de valor requeridos por el extorsionador; no dudar en cortar la comunicación, ya que muy posiblemente desistirán y buscarán otra posible víctima; escribir inmediatamente todo lo que se recuerde y denunciar siempre los hechos a la Guardia Civil, y controlar los datos volcados en las redes sociales y evitar encuestas en las que se pregunte por datos personales, ya que estos datos pueden ser utilizados por los criminales para hacer creer que se trata de un secuestro real.

En cada Comandancia de la Guardia Civil existe una unidad especializada en la investigación de este tipo de delitos, el EDITE (Equipo Delincuencia Informática, Tecnológica y Económica).