Xabier Macias Cipriain y Elisa González se han proclamado ganadores de la XVI edición de la Media Maratón Roncesvalles-Zubiri este domingo. El atleta de Hiru Herri, de Pamplona, ha alcanzado la meta de los 21k con un tiempo de 1:17:55. Por su parte, la de Etxauri llegó en 1:38:53.
En segundo lugar del masculino ha llegado Ion Sola, de Arre, con 1:18:30 y, siete segundos después, el bronce Mikel Etxamendi, de Burlada. En segundo puesto femenino ha quedado Elena Calvillo, de Beasain, con 1:42:34 y en tercer lugar, la cirbonera Miriam Izal, con 1:48:38.
Esta edición, Macias superó con creces la marca del año pasado, el 1:24:14 de Atarratze Rota, pero sigue lejos del récord de Antonio Etxeberria de 2014 (1:12:10). González, sin embargo, ha quedado un poco detrás de la ganadora de 2022, que fue Ainara Alcuaz, con 1:37:13, también muy lejos de la plusmarca de Laura Sola de Miguel hace nueve años (1h.27:33).
LA CARRERA
Con salida en la Real Colegiata de Roncesvalles y llegada a la plaza del Ayuntamiento de Zubiri, tras pasar por Auritz-Burguete, Auritzberri-Espinal, Bizkarreta-Gerendiain y Lintzoain, el recorrido siguió casi por completo el trazado de la primera etapa jacobea, con la única excepción de un tramo de asfalto en Auritz-Burguete para evitar embudos de ciclistas en los primeros compases de la prueba.
El trazado, de unos 21,300 kilómetros (unos 203 metros más que una media maratón homologada), tiene una altimetría de leve pero casi continuado descenso, ya que Roncesvalles está a una altitud de 523 metros más que Zubiri.
Desde 2006
La Media Maratón Roncesvalles-Zubiri, que organiza la Asociación Deportiva Zaldiko con la dirección técnica de M2Eventos y la colaboración de DIARIO DE NOTICIAS, comenzó a celebrarse en el año 2006 y desde 2016 se completa con la Media Maratón Zubiri-Pamplona, que se celebra tres semanas más tarde (este año, el domingo 22 de octubre), para completar en dos carreras el trazado del Camino de Santiago desde Roncesvalles hasta la capital navarra.
Patrocinadores
Leire Remiro, alcaldesa de Valle de Erro, Edurne Irigibel de Magnesitas Navarras, Borja Fernández de Joma a la uzquierda de los premiados, y, Guillermo Larrayoz alcalde de Valle de Esteribar, Ana Zalba de Amavir y Miguel Navarrete de CaixaBank
LA CRÓNICA
Alrededor de 700 personas se han animado a participar en la media maratón Roncesvalles-Zubiri. Un año más, la pequeña localidad de Navarra, conocida por el paso de peregrinos del Camino de Santiago durante todo el año, se ha llenado de gente que ha querido disfrutar de la llegada de los atletas. Cientos de personas se han aproximado a la línea de meta para dar una calurosa bienvenida a los corredores. Calurosa por dos razones: el gran ambiente familiar, con aplausos y ánimos; y por el cielo despejado que ha brindado a los asistentes de un día perfecto para disfrutar en familia. No tanto para los atletas, que han tenido que recorrer 21,300 kilómetros a pleno sol y con un calor de 25 grados.
El ganador en esta dieciseisava edición ha sido Xabier Macias, de Pamplona, con un tiempo de 1h.17:55. No ha podido batir el récord histórico de la carrera, de Antonio Echeverría, que en 2014 hizo una hora y 12 minutos y hasta el momento nadie ha podido destronarlo. El segundo clasificado ha sido Ion Sola, de Arre, con un cronómetro de 1h.18:30. Y el tercero, de Burlada, Mikel Etxamendi, que ha llegado a meta siete segundos después que su compañero.
La mujer también ha tenido un protagonismo importante en la Roncesvalles-Zubiri. Alrededor de 100 mujeres, el 16% de los participantes, se han animado a correr la media maratón. La ganadora ha sido Elisa González, de Etxauri, que ha hecho un tiempo de 1h.38:53. Tras ella, unos minutos más tarde, ha llegado Elena Calvillo, de Besáin. Era su primera vez en la Roncesvalles-Zubiri y ha logrado subirse al podio con un buen tiempo de 1h.42:34. El trío de laureadas lo ha completado Miriam Izal, de Cintruénigo, que con mucho ímpetu y con un esprint final ha cruzado la línea de meta con un cronómetro de 1h.48:38.
Más tarde han ido llegando el resto de corredores y corredoras. Algunos más cansados que otros, pero todos ellos con una sonrisa inevitable en el rostro. Una mueca de felicidad que se manifiesta después de recorrer 21,300 kilómetros en un entorno natural, con paisajes bonitos y de forma segura.
Todo ello ha sido posible gracias a todos aquellos voluntarios que han decidido, un año más. ayudar a que la Roncesvalles-Zubiri se haga de forma segura. Cada cinco kilómetros los corredores han encontrado un puesto de avituallamiento para refrescarse.
Y tras cruzar la línea de meta, la organización les tenía preparada una sorpresa. Antes de la entrega de premios, todos los atletas han podido recoger su medalla y disfrutar de un pintxo de txistorra y un refresco. Todo ello acompañado de la asistencia de masajistas para aquellos que lo necesitaran.
La media maratón Roncesvalles-Zubiri ha tenido un éxito rotundo un año más. Con alrededor de 700 participantes que han disfrutado de un ambiente sano, seguro y acompañados de sus familiares y amigos.
Mauricio Blanco: “A mí me gustaría pasar de 800 participantes y acercarnos a 900”
Desde el punto de vista de la organización, la media maratón Roncesvalles-Zubiri ha vuelto a ser un éxito. En su dieciseisava edición, más de 700 corredores se han inscrito para participar en una carrera que se caracteriza por los buenos paisajes y la asistencia de corredores de distintas partes del Estado.
Mauricio Blanco, presidente de Zaldiko, fundador y organizador de la carrera, ha estado presente tanto en la línea de meta como en la entrega de premios. Ha manifestado que esta edición de la media maratón Roncesvalles-Zubiri “ha ido verdaderamente muy bien. Estamos contentos porque el año pasado tuvimos 400 corredores y este año hemos tenido 700”. Año tras año, más gente se anima a participar. Tras la pandemia hubo un pequeño bajón, pero hoy ha vuelto a tener la asistencia que se merece. La subida de corredores no es casualidad. Además de la buena organización del evento, “ha habido un auge de carreras y poco a poco se va reajustando”, ha afirmado.
En cuanto a la carrera, no ha tenido reparos en declarar que “es muy especial. Es una carrera que su recorrido, al ser el Camino de Santiago, es una maravilla”. Es algo que distingue esta carrera: su paso por pueblos como Auritz, Aurizberri o Lintzoain, que gozan de un especial encanto.
En cuanto al tiempo soleado, Blanco ha declarado que “ha sido muy bueno para el espectador, pero para el corredor no tanto, ha hecho mucho calor”. Navarra ha regalado a los aficionados y a los corredores un día despejado, perfecto para pasarlo en familia y ver a los participantes. “Estaban previstos 30 grados y son unas condiciones duras para los corredores”, ha añadido. Quizá es por este motivo, las altas temperaturas, que el récord histórico, conseguido en 2014 por Antonio Echeverría, no ha podido superarse. Otro año será.
La Roncesvalles-Zubiri ya lleva dieciséis ediciones y, hasta ahora, con mucho éxito. Blanco ha manifestado que el objetivo de organizar esta media maratón fue “aunar el deporte con el turismo, que venga mucha gente de fuera y que vengan a conocer el Camino de Santiago de una forma distinta: corriendo”.
Los números hablan por sí solos. La media maratón Roncesvalles-Zubiri va en aumento de popularidad y asistencia. Este año, con alrededor de 700 participantes, ha sido un éxito. “El 40% de los participantes son de fuera de Navarra, lo que indica que estamos llevando el tema bastante bien”, ha añadido Blanco, con una sonrisa.
Desde la organización ya piensan en el año que viene para que se vuelva a repetir una jornada perfecta. “A mí me gustaría pasar de 800 participantes y acercarnos a 900”, ha finalizado.
La Roncesvalles-Zubiri ha acogido un año más a cientos de personas en una jornada llena de deporte, ilusión y un ambiente familiar.
XAVIER MACIAS, EL GANADOR
En Zubiri, a las 11 de la mañana, el termómetro se acerca a la azarosa cifra de 30 grados. Momento en el que, desde la Real Colegiata de Roncesvalles, se da el pitido de salida a casi 700 corredores que, sin dudarlo, recorren en manada la estapa del Camino de Santiago. Un trayecto de 21,300 kilómetros (unos 200 metros más que un media maratón homologada)
Decimosexta edición de una carrera que disfrutan personas de todas la edades. Carrera familiar y profesional al mismo tiempo. Y justo de profesional tiene mucho: un récord con diez de años de antigüedad recién cumplidos que, una vez más, y para disgusto de algunos espectadores, sigue invicto. El récord (1h.12:10), de Antonio Etxeberria, se ha vuelto un protagonista clásico en este evento.
En Zubiri, sobre las 12, la gente se empieza a congregar en la meta al ritmo de AC/DC y de los ánimos entusiastas de los presentadores. Diecisiete minutos más tarde llega Xavier Macias Cipriain, primer clasificado de la carrera . Con un tiempo de 1h.17:55, el navarro se ponía las manos en las caderas y recibía con una sonrisa agotada la ovación del público.
El atleta consigue la victoria con una diferencia de 35 segundos respecto al siguiente clasificado, Ion Sola. “Empecé con un ritmo conservador. No sabía cómo iba a responder el cuerpo a este kilometraje y dejé que el primer grupo se adelantara un poco”, asegura Macias. Y con esta estrategia, poco a poco, con constancia, el navarro adelanta puestos y se asegura una plaza entre los tres primeros. “Mis terrenos favoritos suelen ser más verticales, así que había que tener mucho cuidado”, asegura.
“En la última subida nos hemos juntado tres: Mikel Etxamendi, Sola y yo. Pero me dije que había que subir un puntico más y me escapé”, relata. Ya en la última bajada, con las últimas fuerzas, Macias se asegura de forma rotunda el primer puesto.
El calor, que preocupa a muchos corredores, también es motivo de alivios para otros. Con un tiempo más húmedo, la bajada se habría puesto complicada debido al barro. “Es un terreno que no se puede ir demasiado rápido, hay que ir controlando”, dice Macias. Además, al ser un recorrido de montaña y bosque, “en las zonas más sombrías se está muy a gusto para correr. Después, en las zonas de sol pues ya toca agachar la cabeza y hasta las orejas”.
El deportista, miembro del club de atletismo Hiru Herri, es la primera vez que realiza esta carrera, así que la planificación del ritmo y el tiempo es clave. En su club, especializado en las secciones de atletismo, monte y triatlón, “se generan muy buenos grupos de entrenamiento y de mucho nivel”. Sola y Etxamendi, los dos siguientes clasificados, son miembros del mismo equipo. “He entrenado un poco más la pista llana de cara a esta carrera”, explica Macias.
Aunque el récord queda lejos, Macias supera de largo la marca del año pasado: 1h.24:14, de Atarratze Rota.
Una vez termina la carrera, contestadas las preguntas y agradecidas las felicitaciones, Macias abraza a Sola y a Etxamendi y se marcha, resoplando pero con una sonrisa, a por una rodaja de naranja, un refresco y un bordillo donde sentarse.
ELISA GONZÁLEZ, LA GANADORA
Cada vez eran más los corredores que estaban llegando a la meta de la media maratón Roncesvalles-Zubiri. Han pasado 21 minutos desde que el ganador de la carrera y el público, junto con la organización, reciben entre aplausos la llegada de la ganadora femenina, Elisa González, del club Ardoi. Tras los 21 km recorridos, la campeona solo buscaba agua para poder hidratarse y recuperarse, debido al inmenso sol que hay durante toda la jornada.
“La llegada a meta ha sido muy bonita. Siempre se agradece ver a tanta gente animándote tras el gran esfuerzo que requiere esta carrera”, explica la vencedora al acordarse de los últimos tramos. Además, afirma que es la primera vez que participa. Sin embargo, ya conocía la media maratón, ya que fue a animar a su hermano que participó anteriormente y le recomendó competir.
En ningún momento tenía el objetivo de ganar, sino de disfrutar del entorno, de sus compañeros de equipo y de la competición: “Creo que nunca hay que llevar el objetivo de llegar la primera, no he mirado ni quién participaba y me he concentrado en mi carrera”.
Elisa González admite no haber tenido un plan fijo durante el trayecto: “ Hacía mucho tiempo que no corría tantos kilómetros y la estrategia la iba improvisando”. Según iba sintiendo el cansancio en sus piernas, la corredora establecía sus límites, aunque los primeros 10 kilómetros sí que los llevaba más controlados y en el transcurso del recorrido se iba dejando llevar poco a poco hasta llegar a la meta, afirma. También se ha acordado del sol que tanto pega y lo sofocante que es y agradece los tramos por los que se iba a través del bosque, dando tregua a los casi 700 participantes de la prueba.
Además, aprovecha para darse cuenta de la belleza de la naturaleza durante todo el recorrido, lo que hace más espectacular el trayecto. “El terreno estaba en buenas condiciones, seco con el calor y se podía correr todo el rato sin problemas”, apunta. Sin embargo, a pesar de la dureza de los 21 kilómetros, el desnivel que acompañaba y el cansancio de Elisa González, no ha sido suficiente para que la ganadora deje de querer participar en la próxima edición: “Queda mucho para el año que viene, ya veremos. Pero en principio sí. Si puedo, me animaré”.
Al llegar a la meta, quiso impulsar el deporte femenino, concretamente en el ámbito del atletismo y alienta para que cada vez más mujeres participen en iniciativas y carreras como la media maratón Roncesvalles-Zubiri.
Como siguiente paso en su preparación, Elisa González cuenta que su club propone una iniciativa en los próximos días: “En Ardoi estamos organizando una carrera de parejas, el 20 de octubre a las 19.00 horas. Es una marcha popular, donde pasar un buen rato el viernes por la tarde. Para nosotros supone un entrenamiento para prepararnos para futuras carreras y llegar en la mejor forma posible”.
Después de recuperar el aliento, la ganadora se reúne con sus compañeros de club y comparten sus sensaciones respecto a la carrera.
Entretanto, cada vez eran más los participantes los que se encuentran en grupo tras pasar por los puestos de recuperación. Con botellas, yogures y fruta en mano los corredores buscan sombra donde sentarse y recuperar el aliento. Los más cansados se tumban en las camillas y reciben un masaje en sus agotadas piernas.
El sol sigue brillando y no da tregua a las familias que junto a los atletas se dirigen hacia el polideportivo de Zubiri, donde se produce la entrega de premios. La ganadora femenina de la media maratón Roncesvalles-Zubiri recoge el primer premio junto a sus compañeras Elena Calvillo y Miriam Izal, segunda y tercera clasificada, que lucen contentas tras el logro conseguido.
DECLARACIONES DE CORREDORES
Es la primera vez que corre esta media maratón y no está acostumbrada a hacer deporte con tanto calor. “Ha sido dura y lo he pasado muy mal. En el kilómetro once ya me empezó a costar bastante”.
Ha ido con calambres desde el kilómetro 11 y ha tenido que medir mejor sus fuerzas. Es la primera vez que hace esta carrera, pero se ha quedado con ganas. “Estoy muy enfadado de lo mal que me ha salido. El año que viene, mejor”.
Xabier define la media maratón como una carrera preciosa y única: “Debido al calor he controlado más el ritmo para no quedarme sin fuerzas en los últimos tramos. Al final he llegado bien y estoy satisfecho”, explica.
El corredor Egoi confiesa que su tramo más duro ha sido la última bajada. Sin embargo, ha disfrutado de una bonita carrera sorprendido por la gran afición que reune la media maratón Roncesvalles-Zubiri.
“Suelo hacer carreras de obstáculos pero dos de mi pueblo iban a participar y yo me he animado con ellos”. Era la primera vez de Uxue como corredora y recomienda disfrutar de esta prueba por la belleza del paisaje.
Para Elia era la segunda vez que participaba en la carrera y aseguraba que el año pasado fue mejor porque hacía menos calor. Aún así, Elia afirma haber disfrutado gracias al buen ambiete que había en Zubiri.
