El Helvetia Anaitasuna se queda con el premio de puntuar en los labiosIñaki Porto
HELVETIA ANAITASUNA 28
BIDASOA IRUN 29
Helvetia Anaitasuna (12+16) Cancio (portero), Ganuza (2), Alonso Moreno (3), Samu Pereiro (2), Aitor García (4), Xavi González y Pablo Itoiz (2) –siete inicial–. También jugaron Santamaría (portero), Ernesto Goñi, Aitor Albizu (8), Kisselev, Pablo Castro, Elustondo (1), Marco Moreno, Zungri (1) y Redondo (5, 3p).
Bidasoa Irun (12+17) Skrzyniarz (portero), Zabala (2), Tao Gey-Emparan (1), Furundarena, Esteban Salinas (4), Mujica y Asier Nieto (6) –siete inicial–. También jugaron Leo Maciel (portero), Cavero (4, 1p), Jevtic (1), Rodrigo Salinas (2), Iribar (2), Gorka Nieto (5, 1p), Dariel García (2) y Pacheco.
Marcador cada cinco minutos 4-2, 7-4, 7-5, 8-8, 12-8 y 12-12 (descanso); 13-15, 16-18, 18-20, 22-24, 25-26 y 28-29 (final).
Árbitras Lorena García Gil (Zaragoza) y Tania Rodríguez Estévez (Galicia). Excluyeron dos minutos a los locales Zungri, Kisselev y Pereiro (2); y a los visitantes Furundarena, Esteban Salinas y Asier Nieto.
Pabellón Anaitasuna. Unos 850 espectadores, con nutrida y animosa presencia de aficionados irundarras.
El Bidasoa Irun se llevó nuevamente el derbi del pabellón Anaitasuna –algo que encadena desde 2017–, tras ganar este domingo en el último aliento por 28-29 a un Helvetia que opuso resistencia, llevó la iniciativa del encuentro en varias fases tanto en el juego como en el marcador y que tuvo en sus manos arañar un punto, pero acabó por quedarse sin una recompensa que hubiese sido bastante merecida. Así es el deporte.
Los de Quique Domínguez salieron sin complejos, con la intención de refrendar el triunfo en Huesca, y de inicio engancharon un 4/0 de parcial que obligó a Álex Mozas a pedir tiempo muerto cuando no habían transcurrido ni cuatro minutos de juego. Esteban Salinas rompió la sequía para el Bidasoa y Asier Nieto le acompañó para reducir la distancia.
El Helvetia desplegaba argumentos en ataque, con Aitor García subiendo la renta a cuatro desde los seis metros (6-2, m.6), pese a que Skrzyniarz detenía el primer 7 metros a Xavi González –posteriormente haría lo propio con Alonso Moreno–. La defensa, además, arropaba a la perfección a un Marcos Cancio que mantuvo a su equipo muy metido en el partido con sus 19 paradas –diez en el primer acto–.
Transcurridos diez minutos, y con los navarros luciendo ventaja, el encuentro se enmarañó. Bien es cierto que tanto el asturiano como Jakub Skrzyniarz hacían sus dominios inquebrantables, pero los dos equipos empezaron a encadenar errores en ataque. Anaitasuna, de hecho, estuvo seis minutos sin marcar y el Bidasoa aprovechó esta circunstancia, junto a la exclusión de Itoiz, para igualar el marcador (8-8, m.19).
Esto pareció dar un toque de atención al Helvetia. Metió un punto más de ritmo, confió en Cancio, recuperó balones en defensa –lo que le gusta, vaya– y con el acierto de Albizu y Aitor García endosó un parcial de 4/0 al Bidasoa a falta de cinco minutos para el descanso (12-8). Sin embargo, a ese arreón le siguió una cadena de desaciertos, de nuevas pérdidas en ataque y de las contras protagonizadas por Gorka Nieto y Cavero, que hizo que el Bidasoa le devolviera el parcial y un empate, esta vez a 12, con el que los jugadores se fueron al vestuario.
En el descanso se recogieron peluches que, junto a los juguetes que se donaron, se entregarán a la iniciativa 'Beriáin con Massanassa'.
Nada más reanudarse el duelo, Rodrigo Salinas puso por primera vez por delante a los irundarras. Redondo, que acabó por asumir los lanzamientos desde los 7 metros, igualaba la contienda. Pero todo lo que no le había salido el Bidasoa en la primera parte lo iba a enmendar en la segunda. Cavero anotaba desde el extremo derecho y Dariel García, errático con anterioridad, no fallaba. Gorka Nieto llegó a colocar la renta en cuatro goles (16-20, m.43), pero eso no desanimó a Anaitasuna. Cancio seguía de dulce y arriba respondía especialmente Albizu, muy resolutivo. Él fue quien acortó la distancia a un sólo tanto y así entraría además el partido en los últimos diez minutos (23-24).
Aunque el Bidasoa quería sentenciar, apoyado en la efectividad de Gorka Nieto, el empate volvería a lucir en el marcador gracias a un trallazo de Alonso Moreno. Cancio volvió a brillar cuando más se le necesitaba y el Helvetia gozó de un balón para ponerse por delante. Pero en una extraña jugada, Samu Pereiro, en el suelo, se quedó con el balón en sus manos esperando una clara falta que no se sancionó. El balón regresó a un Bidasoa que no fallaba con Zabala. Albizu hizo el 28-29 en el m.29 y aunque el meta asturiano propició un nuevo ataque local tras evitar que Cavero anotase, la jugada acabó con un golpe franco final que Ernesto Goñi, con toda la barrera rival delante, lanzó sin éxito.
Perdida esta oportunidad de puntuar ante el Bidasoa Irun, ahora toca poner las miras en el Ademar de León.
Quique Domínguez: "Nos deja tristes"
Quique Domínguez, tras el partido, comentó: “Hemos estado muy cerca de puntuar y se nos ha escapado. Nos quedamos con la sensación de que un punto nos hubiera sabido muy bien. Lo hemos tenido muy cerca. Pero al final se va para Irun y nos deja tristes, aunque sabiendo que hemos entregado todo. Más no se puede dar”.