Levantarse con el rostro hinchado, ¿te suena? Alcohol, poco sueño, mucha sal en las comidas… Las causas de este problema pueden ser muchas y, aunque esta situación bastante frecuente, especialmente en meses calurosos, no resulta agradable. Sin embargo, hay que tener en cuenta que si esta hinchazón es persistente y va acompañada de otros síntomas, es recomendable que acudamos a un médico para descartar problemas de salud. Aquí tienes una recopilación de las causas puntuales más comunes que provocan una cara hinchada y algunos consejos para evitarlo.

Causas de un rostro hinchado

  • Retención de líquidos. El origen de este problema puede estar, entre otras causas, en un abuso de alimentos ricos en sal, productos procesados y una falta de hidratación, factores que dificultan la capacidad de nuestro cuerpo de eliminar líquidos.
  • Horarios de sueño. No dormir lo suficiente puede provocar que nuestro rostro se vea más hinchado debido a la falta de descanso.
  • Mala higiene facial. Dormir con maquillaje o no lavarse el rostro antes de irse a la cama favorece que nuestros rostros se vean más inflamados a la mañana siguiente debido a la acumulación de sudor y suciedad a lo largo del día, lo que dificulta la regeneración celular y a la oxigenación de la piel.
  • Cambios hormonales. También hay que tener en cuenta en qué fase del ciclo menstrual nos encontramos debido a que los cambios hormonales que implica influyen sobre la retención de líquidos.

Remedios para tratar la hinchazón

  • Aplicar frío. Lavarse la cara con agua fría o colocar sobre el rostro unos cubitos de hielo envueltos en una toalla pueden ayudar a reducir la inflamación ya que el frío facilita la circulación sanguínea. Sin embargo, es importante que recuerdes no aplicar el hielo directamente sobre la piel ya que podría quemarla o irritarla.
  • Mantener una buena hidratación. Consumir agua, tanto a través de la alimentación como en forma líquida, ayuda a evitar retenciones de líquidos y favorecer el correcto funcionamiento de nuestros órganos.
  • Actividad física. Practicar deporte también es una forma de mejorar la circulación sanguínea.

Una mujer practicando deporte. Pixabay

  • Masajes faciales. El drenaje linfático es un tipo de masaje que tiene el objetivo de reducir la retención de líquidos, por lo que su aplicación en el rostro puede ser beneficiosa. Podemos darnos masajes a nosotros mismos para relajar nuestro rostro por las noches y evitar tensiones que puedan manifestarse en forma de hinchazón.
  • Lleva una dieta saludable. Reducir el consumo de sal y cenar más temprano y ligero pueden ayudarnos a mejorar el aspecto de nuestro rostro hinchado. Además, debemos llevar una dieta variada y equilibrda y procurar disminuir la presencia en nuestra alimentación de productos como las harinas refinadas, azúcares, grasas y alcohol, especialmente por la noche.
  • La altura de tu almohada también cuenta. Es posible que la hinchazón de nuestro rostro esté causada por una almohada demasiado baja, que también puede producir ronquidos. Sin embargo, debemos tener en cuenta que la altura no sea excesiva, lo que podría dañar nuestras cervicales. Asimismo, evita dormir bocabajo y, para conseguir una buena calidad del sueño, busca que la temperatura de tu habitación se encuentre cerca de los 18 grados.
  • Bolsas de té. Otro método para reducir la hinchazón es enfriando las bolsas de té verde o negro que hayas consumido para poder aplicarlas en el rostro a la mañana siguiente.