El rover 'Perseverance' de la NASA aterrizó, aproximadamente a las 21.48 horas, en el cráter Jezero de Marte y ya ha comenzado a buscar signos de vida anterior y a recolectar muestras que serán devueltas a la Tierra en una misión posterior.

La NASA determinó que el quinto 'rover' que explorará Marte sobre el terreno en los últimos 24 años aterrizara en Jezero, un cráter de 49 kilómetros situado en el hemisferio norte del Planeta Rojo, justo en el borde entre una meseta elevada, conocida como Terra Sabaea, y una llanura más baja, denominada Isidis Planitia.

'Perseverance',tras recorrer casi 480 millones de kilómetros de vuelo espacial desde la Tierra, se posó dentro de un círculo de apenas ocho kilómetros de diámetro, situado a los pies de lo que parecen los restos de un delta en una zona de la que se piensa que estuvo inundada en el pasado.

De hecho, como explica la propia NASA en la página web de la misión, sus científicos creen que hace unos 3.500 millones de años varios ríos desembocaban allí en un gigantesco lago. Y donde hay agua, añade, es probable que alguna vez hubiera vida.

Dos instrumentos desarrollados en la UPV/EHU

Dos instrumentos de 'Perseverance', una estación meteorológica y un sistema para hacer análisis a distancia, han sido desarrollados con la colaboración de dos equipos de investigación de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).

Son el Grupo de Ciencias Planetarias, de la Escuela de Ingeniería de Bilbao, dirigido por el catedrático de Física Aplicada Agustín Sánchez-Lavega, y el equipo de investigación IBeA, de la Facultad de Ciencia y Tecnología, liderado por el catedrático de Química Analítica Juan Manuel Madariaga.