pamplona. De siete a ocho de la tarde, de lunes a viernes, los oyentes de Onda Vasca escuchan a Alfredo Irasuegui, que coge el relevo de Begoña Beristain en La tarde en Euskadi. Además se encarga -y con mucho gusto- del seguimiento del Athletic para los programas deportivos generales.

Este tramo es uno de los más jóvenes de la emisora, de los que nacieron con la ampliación de la programación a veinticuatro horas el 3 de mayo. ¿En qué consiste?

Es una continuación del que conduce Begoña Beristain, tal vez con unas entrevistas más ligeras. El objetivo es hacer pasar un rato agradable a nuestros escuchantes. Intentamos hacerlo lo más llevadero posible, pero sin dejar de lado la actualidad.

¿Cómo fueron los primeros días con 24 horas de programación?

Todo el mundo dio el do de pecho, que es de lo que se trataba, y de minimizar los fallos. Yo estaba como un flan porque no quería fallar a las personas que han apostado por mí. Onda Vasca es una emisora joven pero con gente muy preparada, que es lo verdaderamente importante para darle el impulso necesario. No sólo tiene visos de continuidad, sino también de prosperidad en un corto plazo. Se trata de gente muy competente y eso da fiabilidad no sólo a la emisora, sino también a las personas que acabamos de entrar. Lo importante es tener confianza en el proyecto y en los compañeros.

¿Cómo han recibido la última medición de CIES?

Con alegría, ilusión y la sensación de que las cosas se están haciendo bien. Son datos que nos dan fuerza para mejorar y darlo todo. Esto es como un expositor en el que la gente en lugar de verte, te escucha. Si no está contenta va a cambiar de emisora. Nuestro propósito es que no muevan el dial y que sigan siempre en compañía de Onda Vasca.

¿Es habitual que una emisora tan joven tenga esta progresión?

No. Este avance responde a una necesidad de la gente. Onda Vasca ofrece un modelo de radio diferente.

¿Qué hacía antes del 3 de mayo?

Un magacín en Herri Irratia y también deportes, retransmitiendo incluso los partidos del Athletic. Comenzaba a trabajar a las siete menos cuarto con una intervención de Deportes en el informativo general de la mañana y luego preparaba el programa, hacía repasos informativos, sobre todo desconexiones locales de Bizkaia, y después entrábamos en materia con un programa que aunaba cultura, sociedad e incluso deportes. Y los fines de semana el Athletic.

Ha cambiado las siete de la mañana por las siete de la tarde...

En lo que se refiere al horario, la estructura de mi vida ha dado un giro completo.

¿Un nuevo programa es como un hijo?

Pues sí. Tengo una niña de seis meses y estamos como locos con ella, pero a un nuevo programa también lo quieres con locura y lo tratas lo mejor posible. Es imprescindible sentirte a gusto con el producto que estás realizando porque si no, la gente que está escuchando se da cuenta.

¿Los magacines son lo suyo? ¿Le gustaría hacer otros formatos?

Me gustan los magacines porque tocan varias áreas y aprendes mucho. Yo soy profano en muchas materias pero cuando tengo que hacer una entrevista me documento para intentar estar a la altura del invitado. En cuanto a lo que me gustaría hacer, estoy muy a gusto en este programa. Además, me considero polivalente. Me gustan mucho los deportes, he hecho muchos años, pero no tengo problema en ir a ningún tipo de programa.

¿Todos los deportes o sólo el fútbol?

Tengo la suerte (o desgracia, depende) de que me gustan prácticamente todos.

¿Qué opinión tiene de la temporada que ha hecho el Athletic?

Ha sido una decepción porque un mes antes de acabar se sopesaba la posibilidad de la Liga de Campeones. Analizándolo más en frío, creo que cuando empezó la temporada hasta el hincha más acérrimo se hubiese sentido satisfecho con eludir el descenso con la solvencia con la que lo ha hecho el Athletic. Me parece un buen resultado, pero sin obviar que hasta el último instante se ha peleado por entrar en Europa.

¿La Real se quedará en Segunda?

No. La Real ascenderá porque se lo merece. Es cierto que ha cogido un bache de resultados en el momento culmen pero aun así mantiene un colchón importante.

¿Cómo ve a Eibar y Real Unión?

Ojalá ascienda el Eibar. Tengo un amigo en la plantilla, Txiki Lombraña. Además lo tiene bien. En cuanto al Real Unión lo mismo. El cuerpo técnico casi al completo es de mi pueblo. Conozco a Abasolo, a Iglesias... Me encantaría que se salvara y tiene a su favor algo importantísimo, la tendencia. El hecho de venir de menos a más, de llegar al tramo final de la temporada con la moral por las nubes, le hace ser un rival temible, capaz de llevar a cabo remontadas imposibles como ocurrió ante el Numancia. Además por juego ha demostrado ser mejor que muchos de los equipos que cohabitan en Segunda División.

¿Osasuna ha respondido a las expectativas?

Osasuna ha cumplido plácidamente con el objetivo marcado, que es eludir el descenso con relativa comodidad.