roma. La actriz italiana Monica Bellucci vuelve a convertirse en una femme fatale, para protagonizar, esta vez, el nuevo anuncio de la marca de bebidas Martini, en el que también participan los diseñadores de moda italianos Dolce & Gabbana.
Rodado íntegramente en Roma, entre monumentos tan significativos como la Fontana de Trevi, el Castel Sant"Angelo o plaza Navona, el anuncio es un homenaje a la esencia italiana de los años cincuenta y al cine de directores míticos como Federico Fellini.
Un spot que recupera la imagen de la Italia más clásica para presentar la nueva bebida Martini Gold y que ha contado con los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana como directores creativos además de como actores ocasionales.
Con un vestido de encaje negro, grandes gafas de sol y caminando sobre unos tacones de infarto, Monica Bellucci encarna a una femme fatale que atrae las miradas de todos los hombres a su paso por el centro de Roma. El paseo culmina entre risas en el conocido Café della Pace, compartiendo un Martini con sus amigos Domenico Dolce y Stefano Gabbana. La actriz luce espectacular por las calles de Roma y no queda ni rastro de su último embarazo ya que dio a luz el pasado mes de mayo a una niña.
El anuncio se rodó durante los meses de junio y julio pasados y ha sido dirigido por el director sueco Jonas Akerlund, uno de los realizadores preferidos por estrellas del pop como Madonna o Lady Gaga.
La sensualidad característica de anteriores campañas publicitarias de la firma italiana, en las que participaron estrellas como George Clooney o Salma Hayek, se hace patente de nuevo, esta vez de la mano de su protagonista.
Bellucci representa a una mujer mediterránea, guapa y segura de sí misma, que concentra la esencia de la tradición más italiana. "Cuando dices Monica Bellucci te viene a la mente Italia, una mujer dulce, femenina, un tipo de Anna Magnani de hoy", reconoció Stefano Gabbana.
Y es que el dúo de diseñadores explicó que con este anuncio querían remarcar un "estilo de vida muy italiano". La propia Monica Bellucci admitió que fue "divertido" poder hacer este anuncio con los modistos italianos, a los que considera buenos amigos y con los que ha colaborado previamente en numerosas campañas de moda.