El artista pamplonés Jose Castiella centra en Bilbao la muestra "Game Over"
exhibe sus pinturas más recientes en la Galería L"Atelier Adriana Rojo hasta el 29 de abril
pamplona. Inquietante y sarcástica, desenfadada a la vez que reflexiva, y con tantas dosis de autenticidad como de aparente irrealidad. Un reflejo de nuestro tiempo en el que la belleza formal dialoga con un contenido abierto a interesantes y múltiples interpretaciones. Tantas como espectadores.
Así es la pintura de Jose Castiella (Pamplona, 1987), un artista que "en vez de distraerse, como es lo propio de su edad, con el glamour de la tecnología y una buena agenda de referencias y relaciones up to day, ha escogido la soledad del individuo en su estudio, enfrentado a un mar de dudas". De esta manera escribe Jorge Latorre en su texto a propósito de la exposición que el artista pamplonés, tercer premio del Concurso Jóvenes Artistas 2010, protagoniza en Bilbao. Allí, en la Galería L"Atelier Adriana Rojo (C/Cosme Etxebarrieta, 15), el creador exhibe una muestra de su particular figuración pictórica bajo el título de Game Over. ¿Y por qué éste? "Primero porque cada obra de arte es un fracaso, y en cierto modo porque el arte habla del tiempo, la muerte, lo inacabado", dice Jose Castiella. También por su interés por la cultura del videojuego: "A una partida sigue siempre otra", apunta. Y por "ese seguir jugando con la pintura, con la vida, a pesar de todo", añade el joven creador -pero maduro en talento- sobre su exposición, fruto de dos intensos meses de trabajo en los lienzos, pero de mucho tiempo previo en que "las ideas han estado flotando por el estudio".
Hay algo del cómic en Game Over -Castiella empezó dibujando cómics de Chris Ware, Robert Crumb...-, y de la modernidad de Cézanne, "en la que la materia pictórica misma se exhibe sobre la superficie del lienzo, y que depende más del resultado inesperado que de un tema preconcebido", sostiene Latorre. "El objeto pintado se va definiendo a medida que el espectador va recorriendo la superficie del lienzo. Tiene algo de divertido, consigue lo que predicaban los expresionistas abstractos con su all over, pero con pura ilustración: que el espacio pictórico se trate con frontalidad y no haya jerarquía entre las distintas partes de la tela. Como una perversión de la modernidad", cuenta el autor de la exposición, que da buena muestra de la avidez de Jose Castiella por el mundo que le rodea, por sus nuevas formas de expresión visual, y por los asuntos que habitualmente pasan desapercibidos por ser tan rituales como habituales, pero que aquí son la inspiración. La luz artificial y el interés por el color sintético, industrial, son notas comunes a los cuadros de Game Over, en los que también está presente el humor sarcástico, un humor que está como de vuelta, que se muestra crítico y, sobre todo, con vocación de verdad. La misma con la que traza su firme andadura este joven artista.