MADRID. Con planteamientos muy diferentes y variados, algunos más transgresores, los diseñadores que han desfilado hoy, muchos de los cuales ven en el masculino un mercado con más futuro, han mostrado que saben el oficio y hacen gala de ello en prendas muy bien hechas, con patronajes estudiados y perfectos acabados.
Este es el caso de Etxeberria, que en la última edición de Cibeles recibió el Premio L'Oreal a la mejor colección del EGO, que en "Jour de fête" (Día de fiesta), se inspira en la película del francés Jacques Tati para vestir al hombre a lo largo de todas las horas del día.
El protagonista de Etxeberria vive en una ciudad del norte, en San Sebastián o en Biarritz. El deporte, la playa, el aperitivo, la comida, la tarde, la noche e incluso la boda transcurren en unas propuestas en las que el diseñador de Eibar ha querido explorar diferentes looks.
Y lo ha hecho con telas brillantes de rayas azules y blancas, con cuadros ingleses, con tejidos más femeninos tipo piqué o con cueros troqueados y cazadoras de piel de anguila.
La de Etxeberria es una colección muy abierta, nada homogénea, en la que los pantalones, bombachos tipo golf, de montar a caballo o pitillo bajo la rodilla, tienen un protagonismo especial.
"Trucha con lentejas" es el título de la colección masculina con la que Ixone Elzo hace un homenaje a la comida.
Inspirada en los bodegones y en el mundo de los bordados de punto de cruz, de gancho anudado y de tricot, la diseñadora de Hondarribia ha creado prendas hogareñas, como batines y pijamas con un toque señorial, pero modernizados, con estampados de lentejas o de plátanos.
El hombre de Ixone Elzo lleva también chaquetas con langostas, centollos o cebollas bordadas y como accesorios, grandes bolsos que recuerdan a las bolsas y a los carros de la compra .
No faltan en la colección los grandes baberos ni los cubiertos, bordados en las camisas o que salen de los bolsillos de las chaquetas a modo de pañuelos.
Los tejidos han sido el hilo conductor de la colección del segoviano Luis Manteiga, que ha usado tela de saco, en capas y trajes de hombre; cordones de pasamanería, para pantalones short y monos, también para hombre; fieltros, en crudo para elegantes abrigos de mujer y de hombre, e incluso plásticos transparentes en verde para camisas y otras prendas.
La mujer de Manteiga se tapa, mientras que el hombre se muestra más atrevido y opta en ocasiones por las faldas.
El madrileño Alberto Puras viste a un hombre joven y atrevido, al que no le importa arriesgarse y que quiere ir cómodo y lo consigue con amplios pantalones de frescos tejidos, shorts, camisas que se despegan del cuerpo y trencas de verano, largas y amplias.
El futuro y pasado se fusionan en la colección de la gallega Alba Cardalda, con prendas que respiran un aire deportivo muy urbanita. María Lemus y Víctor Alonso, de María Ke Fisherman, defienden una colección callejera y deportiva, de aire rapera, confeccionada con goma elástica que rescatan de los calzoncillos y que mezclan con hilo elástico y croché tejido a mano.
Shen Lin, que por vez primera desfila en EGO, se inspira en la pintura de Zurbarán para confeccionar piezas que respiran misticismo y espiritualidad, mientras que la colección de Beba's Closet representa un viaje emocional que va de la tristeza a la ilusión a través de los colores y de los volúmees.
Moises Nieto, en "Room", ha realizado un estudio de las camisas partiendo de cortes clásicos que ha modernizado y lo ha hecho con éxito en una colección muy femenina, que apetece ponerse. Su hombre es atrevido, pero también partiendo de cortes clásicos que revisa y moderniza.
"Amor Eterno" es el título de la colección en rosa y azul de Ibai Labega, que apuesta por llevar a la figura masculina el gusto y la exquisitez de los patrones femeninos, incluidos los vestidos.