pamplona. María Adánez fue la encargada ayer de presentar la obra ante los medios de comunicación, "con alegría por actuar en una maravilla de teatro como el Gayarre pero con pena por despedirnos de esta obra. La verdad es que ha sido una buenísima gira con la que vamos a llegar a las 99 representaciones".

A punto de alcanzar el final, Adánez retrocedió hasta el principio para llegar a los orígenes de este montaje. "Paco Bezerra fue quien cogió las dos novelas, L'École des filles y Ragionamenti, para dar forma al texto. En la primera ya aparecen las protagonistas, las primas Susanne y Fanchon, y en la segunda se plantea el conflicto de las mujeres en aquel momento (siglo XVI-XVII), de las tres puertas a las que podían llamar; es decir, ser monja, prostituta o casarse con alguien al que casi seguro ni conocían. Basándose en estas dos obras creó La Escuela de la Desobediencia".

Respecto a su personaje, Fanchon, María Adánez afirmó que es una "delicia, uno de los más bonitos que he tenido el placer de representar. Es un personaje muy especial, es una niña muy jovencita que, como todas las de su época, no tenían idea de nada, ni de cómo se quedaban embarazadas las mujeres. Vive encerrada entre los muros de su casa y solo sale para dar un paseo con su madre y a misa. Eso sí, los santos y la Biblia se los sabe de memoria". Sumergida en esta abrumadora desinformación, "recibe la visita de su prima mayor, Susanne (Cristina Marcos), debido a la llegada de una carta en la que se dice que a la pequeña la van a meter en un convento. Antes de que eso suceda, de que la obliguen a tomar una decisión desafortunada, Susanne la va instruir en una escuela portátil, clandestina y ambulante que es ella misma y su sabiduría de vida. Y lo va a hacer para que aprenda a desaprender todo lo aprendido y pueda pensar por sí misma. Todo esto en un momento en el que a las mujeres les tenían vetada la educación y la información; de hecho, la única lectura a la que tenían acceso era la religiosa. No podían tener ni profesión ni inquietud por algo".

"Para Fanchon, que es una mujer inquieta que le gusta la naturaleza y que le roba los libros a su padre, Susanne es una ventana al mundo", matiza Adánez. Una ventana al mundo a la que, al principio, la joven no quiere asomarse, "ya que significa romper con lo establecido y con la Iglesia, algo muy duro de romper entonces y ahora. Pero al final se instruye en la escuela, ya que de otra forma no habría función".

Aunque el tema suene, y lo es, serio, Adánez recordó que se trata de una comedia "en la que la gente se lo pasa muy bien, algo de lo que podemos dar fe".

Música y montaje

Las actrices están acompañadas por música en directo, una soprano y una viola de gamba, "que, de alguna manera, terminan de cerrar este envoltorio maravilloso que es La Escuela de la Desobediencia, que cuenta con escenografía Mónica Borromelo y una dirección impecable por parte de Luis Luque, que ha creado un montaje muy elegante y sencillo".

Sexualidad femenina

Aunque la obra transcurre en el siglo XVII, el texto y sus mensajes no están exentos de actualidad. "Cuando a mí me habló Luis de esta función, hubo un tema esencial, que es de lo que se habla en la obra, que me interesó muchísimo: la sexualidad femenina. Sexualidad que siempre ha estado tapada, escondida y de alguna manera manipulada por los hombres. Incluso se ha llegado a ver como algo peyorativo y oscuro. En este sentido, la obra es, de alguna manera un homenaje a la sexualidad femenina, es una fiesta desde el punto de vista más blanco, lúdico y puro. Es decir, vamos a ver a dos mujeres hablando en un entorno muy privado, que era la única forma en la que podían hablar de sus necesidades y frustraciones, sentirse y desarrollarse", explicó Adánez, quien matizó que, "aunque en este sentido se ha dado una gran evolución y revolución, esta es una función que sigue incomodando y, de hecho, se nos han levantado mucha mujeres, mientras otras se han quedado fascinadas dándonos las gracias. Y es que yo creo que el sexo, siendo tan antiguo como la civilización, sigue incomodando; y es normal, porque no nos han educado para hablar de la sexualidad libremente, se va haciendo poquito a poco. Y eso es lo que a mí me interesaba, la educación sexual femenina, ya que pienso que las mujeres somos las que tenemos las de perder. La educación sexual es un dardo que se lanza al público y que cada uno tiene que responder, en el sentido de que necesitamos una educación sexual libre para poder ser libres".

Pero, a margen del tema central, Adánez destacó que "se habla de muchísimas cosas. De alguna manera, la sexualidad es el vehículo para hablar de todo lo que les rodea y les preocupa. Al final, la función refleja también cómo los alumnos le dan la vuelta a los profesores y acaban cuestionando lo aprendido".

IVA y cultura

Con el IVA a punto de guillotinar la cultura, María Adánez no dejó escapar la ocasión para mostrar su absoluto desacuerdo con la medida. "Si quieren cargarse la cultura, que lo digan y así acabamos antes; es algo que vamos a sufrir todos. Creo que en tiempos de crisis, la cultura es muy necesaria... Los libros, el cine, la música, el teatro, la poesía son las únicas válvulas de escape que tiene el ser humano ante tanta presión. Creo que cuanta más crisis, más cultura se necesita, ya que de alguna manera esta protege al ciudadano. Una medida de este tipo me parece un error, me encantará saber si con este IVA van a recaudar todo el dinero que quieren. Ya es muy difícil que la gente vaya al cine o al teatro, así que con los nuevos precios ya será casi imposible. Simplemente es un manera de acabar con la cultura".

LA FICHA TÉCNICA

l Dramaturgia. Realizada por Paco Bezerra a partir de los textosL'École des filles -anónimo- y Ragionamenti, de Pietro Aretino.

l Dirección. Luis Luque.

l Música en directo. Rosa Miranda (soprano) y Sofía Alegre (violade gamba).

l Encuentro con el público. Tras la representación, las actricesy el director mantendrán un encuentro con el público a partirde las 22.00 horas. Este acto es de entrada libre hasta completaraforo.

l Sinopsis. ¿Por qué la mujer no puede disfrutar plenamente susexualidad sin rendir cuentas a nadie? ¿Quién inventó esas normassociales y morales que supuestamente debemos seguir? Estas sonalgunas de las preguntas que recoge una obra que narra la historiade una joven que antes de meterse a monja es instruida por suprima sobre los diferentes aspectos de la sexualidad femenina,lo que le hará replantearse su vida y las normas de su época.