pamplona. Ya anunció que volvía a la carga con una meta: luchar contra el sistema. ¿Y qué hay más instalado en el sistema que la corrupción y la hipocresía, la falta de confianza?

Contra esta realidad amarga, John Otazu regala esperanza en una acción artística que precisamente pone a prueba dicho sentimiento, hoy tan necesario. Carta a un Rey Mago del Futuro invita a todos los que lo deseen a escribir a este "loco que ama la vida con desesperación" -así se autodefine Otazu- bajo las reglas del juego que él propone, y que pueden consultarse íntegras en la exposición de Mixtos de la Ciudadela, donde está colgado el texto base de esta acción artística, o en el blog http://john-otazu.blogspot.com.es/. "Siempre hablamos del Gobierno, de las malas gentes, de los banqueros, y no nos damos cuenta de que somos malos nosotros. Es decir, no tenemos legitimidad para quejarnos de la corrupción si luego nosotros no somos honrados en nuestro día a día. Deberíamos ser consecuentes con nosotros mismos", comenta Otazu.

Lo único que pide él a quien decida participar de su acción es "que me diga cómo cambiaría el mundo, cuál es su idea, y yo a cambio le ofrezco una lista de regalos", que van desde una bicicleta, un viaje para dos personas al extranjero o un lote de libros hasta un cupón de tiempo de colaboración con una ONG, ayuda para encontrar un puesto de trabajo o alimentos para una familia durante un año. Regalos que los elegidos -los autores de "las cartas más auténticas"- recibirán "en un futuro". "Ahora no tengo ese dinero para hacerlos, pero es genial, porque esa es la idea del universo. ¿Qué es esto de los Reyes Magos? Es ilusión, es esperanza, es la magia de creer... lo que bonito es que la gente confíe, tenga fe en este Rey Mago del Futuro, y me escriba creyendo de verdad en esto". Los participantes deben depositar sus cartas, creadas siguiendo las instrucciones, hasta el 26 de enero en la maleta abierta que John Otazu ha colocado en su parte expositiva en el Pabellón de Mixtos. "Mi palabra de honor está en juego y creo que una persona sin palabra no es nada en esta vida", concluye el artista.