madrid - El cantante bilbaíno Sergio Blanco, componente junto a su esposa Estíbaliz Uranga del famoso dúo musical Sergio y Estíbaliz, falleció ayer a los 66 años, en el hospital San Camilo de Tres Cantos (Madrid), a consecuencia de una grave enfermedad que desde hace dos años le tenía retirado de los escenarios.

Según informó su hija Allende, fruto de su matrimonio con Estíbaliz Uranga, Sergio Blanco falleció a las seis y media de la mañana en el hospital madrileño.

El intérprete sufría desde hace dos años una enfermedad que no ha querido ser desvelada por la familia.

Su hija decía ayer que su padre “era un ángel, una persona maravillosa”. “No tengo palabras para decir cómo era mi padre, tenía una fuerza vital increíble”, añadió la hija mayor de Sergio Blanco.

Amigos personales de Sergio, como el popular presentador José María Íñigo, también quisieron resaltar la faceta más íntima del intérprete: “Algo más importante que si era bueno o mal cantante, o todo eso, es que era una persona excelente, era un tipo encantador, buena gente”.

Sobre la enfermedad que sufría el cantante, el periodista añadió que “la supo llevar con una paciencia y una alegría que ha transmitido a toda su familia. En ningún momento ha transmitido pena o dolor, ha estado siempre con una sonrisa. Es un buen tío, y al margen de eso ha sido un hombre de éxito en la música”.

su vida Sergio Blanco Rivas, nacido en Bilbao en 1948, era un gran aficionado a la música desde su niñez, época en la que comenzó a cantar en coros de colegio y en conjuntos como Los Grillos y Los Campesinos, hasta que en 1968 conoció a Las hermanas Uranga, un trío formado por Amaya, Izaskun y Estíbaliz Uranga, y formaron Voces y Guitarras, que pronto se transformó en Mocedades.

Un grupo que tuvo a Emilio Santamaría, padre de Massiel, como primer representante y promotor; ahora es el hermano de la cantante el que representa a El Consorcio, formación que, tras conocer la noticia, está volviendo de América, según añadió la intérprete.

“Sergio ha sido un artista muy grande, aparte de ser una bellísima persona y cantar muy bien, era un gran escultor y un hombre muy familiar... 66 años es una edad muy joven para morirse”, lamentó Massiel.

Mocedades dejó de contar con Sergio y Estíbaliz en 1972, fecha en la que emprendieron un nuevo camino como dúo, que contó con canciones del compositor santanderino Juan Carlos Calderón, de quien irían de la mano en 1975 al Festival de Eurovisión con la canción Tú volverás, con la que ocuparon el décimo puesto.

Meses después, dos de las voces más reconocibles de finales de los años 70 y la década de los 80 contrajeron matrimonio, el 9 de diciembre en Bilbao. Fruto de este matrimonio nacieron Allende (1983) y María (1988), esta última también cantante.

El año 1985 sería uno de los más importantes en la carrera del dúo, ya que sacaron Cuidado con la noche con los temas Cantinero de Cuba, de Arturo Pareja Obregón, y Te quiero ya, de Hernaldo Zúñiga, un disco que les llevó a lo más alto de las listas de ventas.

El dúo desapareció en 1992 y un año después, junto a Amaya e Iñaki Uranga (ambos hermanos de Estíbaliz) y con Carlos Zubiaga, ex de Mocedades, formaron el grupo El Consorcio, con el que grabaron siete discos, el último en 2008 titulado Querido Juan.

Pero como destacó Massiel, a Sergio Blanco también se le recordará por su faceta de escultor, en la que, tras más de 25 años trabajando en bronce se consolidó como uno de los mejores escultores figurativos, principalmente de temática histórica.

Algunas de las piezas de esa faceta artística se pueden ver en espacios públicos, como la gran escultura sedente del Papa Luna en Peñíscola (Castellón), Juan II de Castilla, en Ciudad Real, o el Duque de Ahumada en Madrid.