Aventuras, cine negro y una historia con mensaje y profunda sensibilidad. Es la propuesta del RoofTop Cinema, un ciclo de cine desde la azotea de Baluarte que en su tercera edición ha querido recordar a tres intérpretes que este año habrían cumplido cien años, Olivia de Havilland, Glenn Ford y Gregory Peck, a través de tres de sus grandes películas: Robin de los bosques (19 de julio), Los sobornados (día 21) y Matar a un ruiseñor (26). Las entradas ya están a la venta en la página de Baluarte y se pueden adquirir a 6 euros por sesión o a 15 si se compra el abono para los tres pases.

El auditorio pamplonés sigue la estela de ciudades como Melbourne, Londres, Nueva York o Tallin de proyectar cine en pantalla grande y en versión original subtitulada en lo alto de un edificio y después de haber apostado por cintas como Con la muerte en los talones, Con faldas y a lo loco y Desayuno con Diamantes, el primer año, y Casablanca, El tercer hombre y Manhattan, el segundo, esta vez la temática irá de aniversarios. Los de una actriz y dos actores del Hollywood dorado. Ella es Olivia de Havilland, conocida por títulos como Lo que el viento se llevó o La heredera y por ser hermana de la también estrella Joan Fontaine (Rebecca). Especialista en dramas, “en esta ocasión hemos preferido programar una película de aventuras porque nos parece más adecuada para el sitio y la época del año”, explica Alberto Cañada, programador de la Filmoteca. Se trata de Robin de los bosques, el clásico de 1938 dirigido por Michael Curtiz y William Keighley en dos etapas. “Es fantástica para verla una y cien veces, fue una de las pocas cintas en color de los años 30 y ganó tres Oscar”, agregó Cañada, que destacó, asimismo, las virtudes de Curtiz, el realizador que dirigió el grueso de la producción “y al que me gustaría dedicar un ciclo”.

El día 21, jueves, será el turno de Los sobornados, cuyo título original en inglés es The Big Heat, el mismo que el de la novela en la que se basa. Estrenada en 1953, “es un paradigma del cine negro”. Se basa en hechos reales acaecidos en los años 40 en Philadelphia, donde se produjeron varios casos de corrupción policial e institucional que solo se atrevió a destapar un periodista en el libro citado. Protagonizada por Glenn Ford y Gloria Grahame, la película de Fritz Lang arranca con un suicidio, el del policía Tom Duncan, que deja una carta en la que confiesa haberse dejado sobornar por una banda de gangsters, pero también denuncia la corrupción de altos funcionarios. Cuando el sargento Dave Bannion trata de esclarecer su muerte tropieza con toda clase de obstáculos.

Por último, Matar a un ruiseñor, el 26 de julio. Robert Mulligan dirigió la adaptación de la novela homónima de Harper Lee. En la época de la Gran Depresión, en una población sureña, Atticus Finch (Gregory Peck) es un abogado que defiende a un hombre negro acusado de haber violado a una mujer blanca. Aunque la inocencia del hombre resulta evidente, el veredicto del jurado es tan previsible que ningún abogado aceptaría el caso, excepto Finch, el ciudadano más respetable de la ciudad. Su compasiva y valiente defensa de un inocente le granjea enemistades, pero le otorga el respeto y la admiración de sus dos hijos, huérfanos de madre. “Esta película le dio a Gregory Peck su Oscar como actor y está considerada un modelo de lo que significa ser honesto”, indicó Cañada, que también señaló que se trata de una historia contra el racismo. La relación entre Peck y Harper Lee, que hasta el año pasado, cuando se publicó Ve y pon un centinela, solo había publicado esta novela, fue tan estrecha que el actor llegó a conocer al padre de la periodista y escritora, trasunto real de Atticus Finch e incluso llamó a uno de sus nietos Harper.

La apuesta del RoofTop Cinema ya está lanzada. El aforo de la terraza de Baluarte es de algo más de 120 localidades y el público suele ser diferente al que acude durante el año a la Filmoteca. “Incluso acuden extranjeros que esos días están de paso por Pamplona”, comentó Javier Lacunza, gerente de NICDO. Todas las sesiones serán a las 22.15 horas en VOS y si llueve, se trasladarán al interior. Ojalá que las nubes se alíen con el disfrute del cine clásico al aire libre.