“Fue la actuación más brutal de la Policía en aquellos años que fueron tan duros”, asegura el entonces lehendakari del Gobierno Vasco, Carlos Garaikoetxea. “Se puede entender desde el punto de vista personal, pero nunca desde el Estado de Derecho” apostilla el abogado Miguel Castell. “Nunca había visto unos cadáveres con tantos agujeros de bala, 113”, declara el forense Paco Etxeberria. “Se utilizaron postas de caza mayor; todo apunta a que había un policía invitado que quiso vengarse personalmente”, opina Fernando Orgambides, experiodista de El País. “Es el reflejo de lo que estaba sucediendo en ese momento”, dice Enrique Villarreal El Drogas.

Estos son algunos de los testimonios recogidos en el documental Pasaiako Badia estrenado esta semana en Pamplona. Se trata de un relato estremecedor de los hechos acaecidos el 22 de marzo de 1984 en el puerto de Pasaia; de la matanza a manos de la policía de cuatro militantes de los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CAA); de una emboscada tapada aún por los tribunales de Justicia que nunca se aclaró y siempre se intentó tapar desde las instancias del Estado. Ahora las familias, tras el último carpetazo del Tribunal Constitucional, miran a Europa para reclamar justicia.

Tres jóvenes licenciados en Periodismo y Audiovisuales por la UPV, Xabier Otamendi, Yuri Agirre y Erik Aznal, de 28, 27 y 24 años de edad, nacidos en Azpeitia de donde eran naturales dos de los asesinados, se enrolaron hace un par de años en un laborioso proyecto para contar esta tragedia. Para relatar unos hechos que no pueden quedar en el olvido y que a todas luces hay que evitar para que no vuelvan a suceder. Verdad, justicia y reparación reclama la memoria histórica.

Ellos no habían nacido cuando se produjo el asesinato de Rafael Delas Txapas, Pedro María Isart Pelitxo, ambos de Pamplona; de José María Izura Pelu y de Dionisio Aizpuru Kurro, de Azpeitia, aquel 22 de marzo de 1984, pero habían oído la historia que en Azpeitia conoce todo el mundo. “Es una historia que nos impactaba y empezamos a documentarnos, a investigar; contactamos con las familias. Todos los años se rinde un homenaje”, recuerda Xabier Otamendi, uno de los realizadores.

concurrida inauguración Dos años de trabajo, de grabaciones ha dado sus frutos. Con Pasaiako Badia, han contribuido a que este crimen no se pueda silenciar. Ficharon a Iban Toledo (cámara) y a Olaia Sánchez (técnica de Audio); removieron instituciones para lograr apoyo y emprendieron en pasado diciembre una campaña de crowdfunding para recaudar dinero con el que poder desarrollar su proyecto. “Nos propusimos obtener 8.000 € en varias semanas y los recaudamos en cuatro días. Ver que la gente respondía bien y que las familias, pese a suponer volver a recordar unos hechos tan duros y doloroso, también colaboraban, nos animó mucho más”, apunta Xabier Otamendi.

El pasado 24 de octubre y ante una sala 1 de los cines Golem de Pamplona con sus 300 butacas ocupadas, tuvo lugar el estreno del documental Pasaiako Badia. Mucha gente tuvo que quedarse fuera. Los realizadores anunciaron que harán más proyecciones por toda Euskal Herria.

Al estreno del documental en Pamplona asistieron los tres realizadores Yuri Agirre, Xabier Otamendi y Erik Aznal, los familiares de los cuatro asesinados, la presidenta del Parlamento de Navarra Ainhoa Aznárez, la jefa de la Oficina de Atención a las Víctimas del Gobierno de Navarra Blanca Burusco, el alcalde de Azpeitia Eneko Etxeberria, el periodista Fernando Orgambides y miembros de las asociaciones Euskal Memoria y Egiari Zor, vecinos y amigos de los pamploneses desaparecidos, entre otras personas.

credibilidad Al comenzar el acto, Xabier Otamendi y Erik Aznal agradecieron a todos los que han participado de una forma u otra en el proceso del proyecto, sobre todo, a los familiares, ya que “somos conscientes” de que para los familiares ha sido “duro” participar en él, reconocieron. “Todo es impactante pero quizás el testimonio de Rosa, que habla desde lo más profundo de su ser, es el más conmovedor”, dice Otamendi y añade “la participación de otras personalidades ha contribuido a dar credibilidad al documental y dan fe de lo ocurrido”.

Al finalizar la proyección, de poco más de una hora de duración, y después de los aplausos, Yuri Agirre anunció la difusión de la película. Pasaiako Badia es un documental que tiene como eje central los sucesos acontecidos en la Bahía de Pasaia en la noche del 22 de marzo de 1984. En aquella noche, la Policía mató a Rafa Delas, Dioni Aizpuru, Pedro Mari Isart y Jose Mari Izura en el transcurso de una sangrienta emboscada. Engañados, viajaron en zodiac desde el otro lado de la muga y encontraron un dispositivo policial apostado en la bahía que los acribilló. Como indica Paco Etxeberria en el documental “a la vista de los cuerpos, todos los que estaban dispararon todo lo que llevaban”.

Relatan sus recuerdos los familiares de los fallecidos Pello Aizpuru y su madre Pilar Arbelaiz, Carlos e Inma Delas, Javier Izura y Arantza Isart. Junto a ellos, los abogados, Miguel Castell (acusación del Ayuntamiento de Azpeitia) y Santiago González; Paco Etxeberria (responsable de las autopsias), Carlos Garaikoetxea (lehendakari entonces), Fernando Orgambides (periodista de El País que destapó el uso de postas, “el uso de armas de caza mayor”) y El Drogas (Barricada compuso una canción alusiva que fue censurada). Joseba Merino (que iba con los cuatro asesinados) y Rosa Jimeno, testigos directos de la emboscada, cuyos testimonios han sido cruciales para conocer los hechos.

Pasaiako Badia cuenta cómo se perpetró el crimen tras la detención y torturas a Rosa Jimeno; que se justificó como respuesta al asesinato del senador socialista Enrique Casas; que de los CAA cayeron 10 activistas y otro, el pamplonés José Miguel Etxeberria Naparra, sigue desaparecido; la autoría de 27 asesinatos; que llenaron las cárceles con largas condenas y cómo siguen siendo silenciados y anónimos los atentados a la vida perpetrados desde el Poder.