Velada romántica con Sergio Dalma

CONCIERTO DE SERGIO DALMA

Fecha: 13/05/2018. Lugar: Baluarte. Incidencias: Rozando el lleno. La banda que acompañó a Sergio Dalma estuvo formada por Giorgio Damico en guitarra, Javi Arpa en guitarra, José Vera en el bajo, Cristian Constantini en la batería, Alicia Aroque en coros y percusiones, y Miguel Ángel Collado en teclados y dirección musical. Entre el público estaba Serafín Zubiri, con quien Sergio Dalma compartió un diálogo a micrófono abierto sobre Eurovisión.

Quién iba a decirlo: con el paso de los años, Sergio Dalma se ha convertido en el principal exponente de la balada romántica en nuestro país. El año que viene se cumplirán tres décadas del lanzamiento de su primer álbum, Esa chica es mía. Dos años más tarde llegaría Sintiéndonos la piel, que contenía su eurovisivo macroéxito Bailar pegados. Aquel fue su pico más alto de popularidad, pero, a diferencia de lo que les ha sucedido a otros, la carrera de Sergio no se apagó después del concurso, sino que mantuvo viva la llama del éxito con discos como Cuerpo a cuerpo, Nueva vida o Todo lo que quieras. En el año 2010 quiso rendir un homenaje explícito a la música italiana, que siempre había estado presente en su música, iniciando una trilogía dedicada a las versiones de canciones de ese país; estos tres discos le han reportado numerosas satisfacciones en forma de discos de platino y extensas giras de conciertos. Pamplona es para el artista catalán visita obligada y a punto estuvo de llenar el Baluarte, que presentaba un aspecto inmejorable para la cita.

El artista catalán no se anda por las ramas y deja claro desde el inicio, incluso antes de pisar el escenario, lo que quiere ofrecer a su público. Cuando se apagaron las luces, una voz en off anunció que el concierto estaba a punto de comenzar y que nos esperaba “una velada romántica”, lo que encendió especialmente al sector femenino del público, que era muy mayoritario (había también algunos niños). Con la audiencia rendida de antemano salieron los músicos y, cuando llegó el momento de cantar, Sergio apareció por las escaleras que había en la parte trasera del escenario, que comenzó su show con temas de Vía Dalma III (Toda la vida o Necesito un amigo). Como suele suceder en estos casos de giras tan exitosas, todos los elementos del espectáculo rayaron a gran altura: la iluminación, el sonido, los músicos, la escenografía? Un gran montaje en el que todo funcionó con precisión: las pantallas del decorado, que iban proyectando imágenes, ayudaron a crear un ambiente que envolviese las canciones; así, por ejemplo, cuando se quedaron solos Sergio, su corista y el pianista para interpretar Sábado por la tarde, aparecieron dibujadas unas farolas, como si estuviesen paseando por la calle. La banda, por su parte, sonó compacta y elegante, tanto en las baladas, que ocuparon la mayor parte del repertorio, como en los temas más acelerados, que también los hubo (El mundo, Tú).

Añadan a eso la solvencia del artista principal, cabello plateado y traje entallado, voz rasgada, marcando con maestría los tiempos de su espectáculo, sabiendo qué es lo que su público espera de él en cada momento y dándoselo sin demora, como cuando paseó entre las butacas mientras cantaba Volare, o como cuando se desprendió de su chaqueta y puso a todo el auditorio en pie con Este amor no se toca y Será porque te amo. Que nadie lo dude: en su estilo es uno de los mejores.